El viceministro de Economía, Axel Kicillof, recibió este jueves al CEO de LAN Airlines, Ignacio Cueto, para intentar destrabar el conflicto por el desalojo del hangar que la empresa chilena tiene en Aeroparque y se llevo de regalo una lección de la snociones básicas del marco legal de la política aerocomercial en Chile.

“Fue una reunión cordial, donde las autoridades de LAN explicaron nuevamente la inviabilidad operativa de no contar con un hangar en Aeroparque. Más allá de que el tema fue resuelto por la justicia, la empresa se comprometió a presentar una informe a la autoridad competente”, comentaron tras el encuentro fuentes de LAN, con el habitual lenguaje diplomático de las corporaciones.

La compañía intenta por estas horas bajar la tensión a toda costa con la Casa Rosada y trata de convencer al Gobierno que la cautelar que dictó ayer la justicia trabando el desalojo de su hangar de Aeroparque, es "una buena salida del conflicto" para la Presidenta.

En esa línea, las fuentes de LAN, agregaron que Kicillof comentó que “no hay ningún interés del Gobierno para que LAN deje de operar en el país”. Es evidente que el escándalo del video de Mariano Recalde afirmando lo contrario, fue suficiente aún para los aguerridos camporistas, como Kicillof que fue vicepresidente de Aerolíneas Argentinas y mantiene influencia en el directorio de esa compañía.

Pero el dato saliente del encuentro ocurrió cuando Cueto le "explicó" al viceministro de Economía que no hay ningún impedimento para que Aerolíneas Argentinas pueda realizar vuelos de cabotaje en Chile, tal como había cuestionado Cristina Kirchner. "Permitimos realizar vuelos de cabotaje a aerolíneas extranjeras, cosa que no es recíproca en otros países", dijo el martes la presidenta durante una breve visita a Uruguay, en obvia referencia a LAN, en lo que se entendió como un gesto de respaldo a Recalde que por esas horas sufría la lluvía ácida de la difusión del video anticipado por LPO, en el que se comporta más como un barra brava que como el presidente de una compañía que se pretende internacional.

La declaración de Cristina ya había sido rebatida esta mañana por el Gobierno chileno. "El cabotaje en Chile es plenamente libre. Cualquier empresa puede operar en cabotaje cumpliendo las normas de seguridad, tal cual sucede en Argentina desde hace unos años", declaró hoy el canciller Alfredo Moreno.

El funcionario recordó que AA operó en Chile a través de “Aerolíneas del Sur”. "Por razones de negocio dejó de funcionar en el año 2008, a motu proprio y voluntariamente, y siguen teniendo las puertas abiertas ", apuntó.

Cueto también le explicó a Kicillof que países como Perú, Colombia y Brasil también tienen políticas de cielos abiertos, por lo que tranquilamente Aerolíneas Argentinas podría ofrecer sus servicios ahí. También Estados Unidos y la Unión Europea lo permiten.

Una vez más, la Presidenta quedó mal parada por la información desacertada que le brinda el presidente de Aerolíneas, Mariano Recalde. Con el agravante de que esta vez el error fue en Montevideo, en un acto que compartió con el presidente de Uruguay, José Mujica, donde además cometió la gaffe de adjudicarse una inversión que era enteramente uruguaya.

Ayer, Recalde intentó corregir el desliz y reconoció que la línea aérea que dirige pudo operar en Chile, pero insólitamente deslizó que las políticas de competencia aplicadas allí terminaron desfavoreciendo a la empresa argentina. "Hay un trato desigual con Aerolíneas. Quisimos hacer vuelos de cabotaje a Chile, pero LAN tuvo una política muy agresiva al respecto", se quejó.

El canciller chileno también replicó esos argumentos. "Naturalmente las empresas vuelan donde estiman que es conveniente volar (...) y pueden hacerlo en forma rentable. Si una empresa distinta va a todos los lugares y recibe un subsidio estatal para hacerlo, eso naturalmente solo lo puede hacer quien recibe ese subsidio estatal", subrayó Moreno.

Este nuevo papelón viene a confirmar lo que se dice desde hace mucho tiempo en el mundo sindical de Aerolíneas: Recalde le miente a la Presidenta acerca de los números y la situación de la empresa. Con este método, el funcionario de La Cámpora ya logró convencer a Cristina de que la presencia de LAN es lo que hace deficitaria a la firma estatal. Así, consiguió vía libre para llevar a cabo el boicot que desencadenó esta crisis.