El Gobierno nacional echó al director del Banco Central Juan Manuel Cuattromo, un hombre de Axel Kicillof que tenía mandato hasta el 2021, y ahora van por los otros dos directores que quedan de la gestión anterior.

La Rosada estaba buscando la forma de echar a los tres kirchneristas que integran el directorio y al parecer con Cuattromo encontró la forma, a pesar de que su designación tenía acuerdo del el Senado de la Nación. Para eludir el procedimiento legal de remoción, el Gobierno anuló el decreto de designación del funcionario debido a una presunta "ilegitimidad manifiesta".

A través del decreto 1038/2016, con las firmas de Mauricio Macri y Alfonso Prat Gay, el Gobierno dispuso que la designación de Cuattromo en el BCRA culmine hoy, cinco años antes de lo previsto en el decreto de su nombramiento, avalado por el Senado el año pasado.

En sus fundamentos, el Gobierno sostiene que Cuattromo ocupó el cargo de director del BCRA por la renuncia -en rigor Cristina lo echó- en septiembre de 2015 de Waldo José María Farías, que había sido designado en septiembre de 2010. "En consecuencia su designación debió efectuarse para completar el período de ley del Director saliente", sostiene el decreto

El Gobierno sostiene que "la inclusión en el Decreto N° 2.131/15 (por el cual se designó a Cuattromo) de la fecha de cumplimiento del plazo de ley excede el alcance por el cual fue solicitado y otorgado el Acuerdo del Senado". Es por esto que lo considera "violatorio de las disposiciones legales" contenidas en la Carta Orgánica del BCRA.

La Carta Orgánica del BCRA establece que “la remoción de los miembros del directorio será decretada por el Poder Ejecutivo cuando mediare mala conducta o incumplimiento de los deberes de funcionario público, debiéndose contar para ello con el previo consejo de una comisión del Honorable Congreso de la Nación”, integrada por representantes de ambas cámaras.

Está claro que el Gobierno eludió este procedimiento legal -a pesar de que de constituir la comisión hubiese tenido mayoría- y prefirió centrarse en la presunta “ilegitimidad manifiesta” que tenía el decreto de designación de Cuattromo, ratificado por el Senado.

Detrás de esta maniobra del Gobierno está la necesidad del presidente del BCRA, Federico Sturzenegger, de echar a los directores nombrados por el kirchnerismo y consolidar su mayoría en el directorio. 

Después de la remoción de Cuattromo, los kirchneristas que permanecen en el BCRA son Pedro Biscay, que fue nombrado en 2014 y es cercano a Alejandro Vanoli-, y Germán Feldman, otro hombre de Kicillof, designado en 2013.