Alberto Núñez Feijóo se ha adelantado la presentación del programa electoral y llegará a la campaña con él bajo el brazo. Los lineamientos fueron redactados a las apuradas y, en consecuencia, el documento que se reveló este martes en el Palacio de Linares es más una guÃa que un compromiso de gobierno. Apenas hay novedades y el acto sirvió para que el jefe de los populares cargara contra Pedro Sánchez.
El dirigente gallego llamó una vez más a "derogar el sanchismo", una idea que va desde tumbar la ley de Memoria Democrática hasta volver al Código Penal anterior para recuperar los delitos de sedición y malversación y, como regalo, tipificar la celebración de referéndums ilegales, un posicionamiento claro sobre Cataluña. Por el momento, un programa reactivo y acompasado a los cinco años del Gobierno de coalición.
También parecÃa preocupado por el Falcón, al que buscará redactarle un protocolo espacial para que ningún presidente haga un "acto polÃtico" con él. La fijación no es solo con los viajes aéreos del lÃder del PSOE, sino con el lÃder del PSOE mismo. Feijóo usó su mensaje para avisar que, si gana y Sánchez no cede a facilitar su investidura, llamará a los barones socialistas para que convenzan a su jefe o, directamente, fuercen su dimisión.
Feijóo hizo gala de su reformismo con un programa que es papel mojado si termina pactando con Vox, porque precisará de una nueva hoja de ruta, más radical y la "alternativa serena" que dice querer representar. Si bien aludió a una reforma educativa, polÃticas para contrarrestar okupaciones en 24 horas y la rebaja del IRPF para las rentas de menos de 40.000 euros -una medida anunciada con anterioridad-, pronto mostró el perfil que pretende establecer en caso de ganar.
Con un fondo del Palacio de la Moncloa y Cuca Gamarra como segunda oradora y protagonista del evento, Feijóo prometió que ninguno de sus hipotéticos ministros cuestionará a la OTAN (en un guiño a Washington, Kiev y Bruselas), tocará el sistema fiscal y modificará la Ley Orgánica del Régimen Electoral General para que quienes hayan sido condenados por terrorismo no puedan ser candidatos, un punto dedicado a EH Bildu.
Más allá de que el documento combine propuestas impositivas, fiscales, sociales y punitivistas -incluso de corte populista-, la atención de la precampaña no está puesta en las propuestas, sino en las alianzas y en las autopercepciones de los principales candidatos. Santiago Abascal le ha recordado hoy a Feijóo que nada de lo que proyecta para su desembarco en Moncloa puede prescindir de Vox.
"Veo algo despistado al candidato del Partido Popular. De hecho, ha empezado a legislar y a emitir decretos antes de ganar las elecciones y es algo preocupante. Es un gran error comparecer a unas elecciones asumiendo que uno es el ganador", apuntó el lÃder de la formación ultra. No solo es presión para un futuro acuerdo, sino un recordatorio de que Sánchez sigue liderando el Ejecutivo y el escenario está abierto.
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