
Nicolás Posse sigue concentrando poder en el gobierno de Javier Milei y cada vez son más frecuentes los roces con ministros. El jefe de Gabinete ya habÃa chocado con Guillermo Francos, como reveló LPO, y ahora lo hace con Guillermo Ferraro, el titular del Ministerio de Infraestructura.
Fuentes al tanto de la situación explicaron a LPO que Posse tiene prácticamente intervenido el Ministerio de Ferraro, a quien en la Casa Rosada ven "débil" para la titánica tarea que implica el dÃa a dÃa de una cartera con múltiples frentes.
Además de contar con la herramienta esencial de tener la última palabra sobre la autorización de los fondos (la misma con la que le complica la gestión a Francos), Posse se reservó en este caso la influencia sobre las empresas públicas.
El jefe de Gabinete dejó bajo su órbita a la SecretarÃa de Empresas y Sociedades del Estado, donde ubicó a Mauricio González Botto una figura de bajo perfil pero que en el gobierno ven con mucha influencia y hasta como un "superfuncionario".
La interna de Posse y Francos complica el funcionamiento del gobierno
González Botto depende formalmente de Posse, pero el manejo de muchas de las empresas públicas está orquestado por el Ministerio de Infraestructura, lo que está provocando problemas en la gestión diaria ya que dependen de la firma de
Ferraro.
A Ferraro lo desplazaron completamente del reparto de los directores de las empresas públicas, donde Posse y González Botto definieron todos los nombres. González Botto todavÃa tiene varios casilleros por definir, como el interventor de todos los medios públicos.
En el gobierno ven a Posse como el alter ego de Milei y cada vez con más poder, a pesar de que en público no se le conoce la voz. Posse logró eso metiéndose en la verdadera mesa chica que integran el presidente y su hermana Karina.
Los funcionarios lo tildan de "dogmático" y dicen que desprecia la polÃtica, por lo que rechaza cualquier tipo de negociación. En privado dicen que Posse dice que hay que avanzar sin tener en cuenta las crÃticas o sugerencias, utilizando siempre la misma respuesta: "A nosotros nos apoya el 60% de la gente".
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