Daniel "El Tano" Angelici tendrá que encarar el último tramo -y acaso el más difícil- de la campaña para pelear por la presidencia de Boca Junior prácticamente en soledad. Es que el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, ya habría decidido despegarse de las internas del club, tras las reiteradas recomendaciones de su asesor estrella, el ecuatoriano Jaime Durán Barba.

Este último domingo, de hecho, en gran parte de la folletería que se repartió en las inmediaciones y también dentro del estadio, Macri ya no aparecía junto a Angelici. "Comenzaron a reemplazar los volantes y los afiches", contó una fuente del club a LPO. Pero la decisión es muy reciente y todavía quedan algunos rastros del otrora apoyo incondicional a "El Tano". En las afueras de la cancha  se podía escuchar un jingle que decía: "Vota por Macri, votá Angelici".

La pelea por la presidencia de Boca Juniors, que se definirá en las elecciones del próximo 4 de diciembre, será encarnizada. Sucede que lo que en un principio parecía una elección ganada de antemano por Angelici, se complicó con el correr de los meses. Y el líder del PRO no estaría dipuesto a dilapidar parte de su capital político en una "lucha menor", en el marco de su aspiración de construir una alternativa nacional para 2015.

Angelici apostó a una mala campaña de Boca y renunció como tesorero del club. Pero no sólo el balance al 30 de junio arrojó un superávit de 50 millones de pesos -algo inédito entre los equipos de Argentina- sino que el conjunto que dirige Falcioni está puntero e invicto en el campeonato.

Como tesorero, también intentó trabar la renovación del contrato de Román Riquelme, la figura del equipo. Para muchos, con ese movimiento intentó garantizar un mal campeonato y aumentar sus chances. El malhumor del hincha, se sabe, siempre perjudica al oficialismo. La gestión de Ameal hizo que el mediocampista emblema finalmente se quedara en el club, y hoy lo utiliza como un eje de su campaña.

La soledad en la que quiso encerrar al presidente xeneixe no resultó como esperaba: las distintas agrupaciones que se oponen al proyecto de Angelici empezaron a aglutinarse. Amor Ameal, de muy buena relación con Carlos Kunkel, conversa con la agrupación Azul y Oro para usarla como plataforma y lanzar su candidatura. Es que el propio Angelici lo dejó sin chances de tener una agrupación propia, al rechazar en Comisión Directiva los avales que había presentado.

En la próxima reunión de Comisión se volverará a analizar este tema, pero la gente de "El Tano" anticipaba que no permitirán que se forme esa agrupación. Por eso, la histórica Azul y Oro de los peronistas Alejandro Vaccaro y Carlos Montero cobra protagonismo y negociará con el presidente para que pueda lanzarse.

José Beraldi, de muy buena relación con el ministro de Economía Amado Boudou, dialoga con Roberto Digón, y no descartan tender puentes para confluir con Ameal y así disputarle seriamente la presidencia a Angelici. "La dificultad es que todos quieren encabezar la fórmula", explican en los pasillos del club.

De lograr esa unidad, la pelea quedaría definitivamente polarizada. Y con ese escenario, el "abandono" de Macri complicaría las chances de Angelici. Sería una nueva derrota del empresario del juego, quien ya fracasó en varios intentos por ganar espacios en la gestión macrista.

"Hay que dejar de lado las aspiraciones personales y construir un proyecto que ponga en primer lugar al club, que está por encima de las personas. No podemos permitir que Angelici utilice a Boca como una plataforma para saltar a la jefatura de gobierno porteña", dicen uno de sus opositores.