Durante todo el día, el teléfono de la Fiscalía Federal Nº 3 –a cargo de Eduardo Taiano- permaneció descolgado, o bien, en uso constante: hoy vencía el plazo para apelar la decisión del juez Norberto Oyarbide de sobreseer a Cristina y a Néstor Kirchner por el incremento patrimonial del matrimonio durante 2008, y Taiano, encargado de apelar, no lo hizo.
La decisión del fiscal no es un hecho aislado: en 2004, el juez federal Julián Ercolini sobreseyó al matrimonio por presunto enriquecimiento ilícito. En esa oportunidad, Taiano intervino como fiscal, y no apeló. En 2007, un fallo con igual resultado al de Oyarbide pero a cargo del juez Rodolfo Canicoba Corral, sobreseía al matrimonio, tras el reclamo impulsado por Ricardo Monner Sans. En esa oportunidad, Taiano tampoco apeló, e incluso pidió que se declarase la “inexistencia del delito”.
"Es difícil distinguir si fue convicción propia de Taiano o qué papel pudo cumplir en todo este asunto el Procurador General de la Nación, Esteban Righi, que es el Jefe de todos los fiscales federales del país. Righi es de la íntima amistad del matrimonio presidencial y su hijo mantiene el Estudio abierto. Allí atienden a algunos de los “gordos”, del mundo sindical", le reveló Monner Sans a LPO, y agregó: "En algún punto no me sorprende que no haya apelado. Si el año pasado no lo hizo, ¿Por qué habría de cambiar de criterio?".
A su vez, el abogado asegura: "No puedo saber si ha mediado en todo este asunto un tema de corrupción, en el sentido económico de la palabra. La corrupción estuvo, seguro, en la faz institucional del problema. Basta con leer la ley de Ministerio Público y las obligaciones de los Fiscales y el artículo 193 del Código Procesal Penal para darse cuenta de todo lo que no se hizo. Ni por el Juez, ni por un Fiscal que debió defender el principio de legalidad", concluyó Monner Sans.
“No tiene el perfil del tipo connivente, pero es una persona que hace la suya, el mínimo indispensable para cumplir y no quiere problemas”, le reconocieron a LPO fuentes que se encargaban de su custodia.
Taiano conserva un perfil bajo, alejado de las cámaras, y es reticente a las declaraciones. En comunicación con LPO, una colega que trabajaba con él en el fuero federal, lo reconoce como un “hombre modesto, para nada mediático, muy tranquilo”. Tanto en la Justicia como sus colegas y allegados, coinciden en reconocer su trayectoria profesional.
El hermetismo de Taiano –que se niega a dar declaraciones- es extensivo a sus empleados de la oficina del quinto piso de Comodoro Py. Allí, hoy mismo, Taiano se retiró a las 16 en punto. Al fondo del piso, a la derecha, está la puerta de su fiscalía, en la que nadie quiere hablar –ni de la (no) apelación, ni de cuestiones relacionadas con su superior-. Sólo se limitan a destacar que “es una gran persona, con un trato bárbaro con los empleados. No tiene ningún antecedente de mal trato, y hace más de una década que está acá”.
Además de haber intervenido en el incremento del patrimonio de los Kirchner en 2004, 2007 y 2008, Taiano investiga las amenazas de muerte contra la presidenta y fue designado para seguir la causa de la ESMA, entre otros casos importantes.
“Teniendo en cuenta el contexto, la actuación de Taiano es correcta, aunque hay cosas que pudieron haberse hecho mejor. Hay que tener espalda en vistas a los imputados en la causa”, le reconocieron a LPO letrados que intervienen en el caso de la ESMA.
Por la “inacción” de Taiano, la UCR ya informó mediante un comunicado, que promoverá el juicio político al fiscal: "Además de violar expresas normas con su conducta, incumplió con el deber de representar a la inmensa mayoría de la ciudadanía que reclamaba un mayor compromiso y conducta en la investigación de un delito tan sensible como el de enriquecimiento ilícito", apuntó el partido radical.