Peronismo
 Fue Menem
Por Ignacio Fidanza
Como Roca y Perón, Menem dio vuelta a la Argentina. Uno de los políticos más carismáticos que tuvo el país, transitó toda la paleta ideológica del peronismo.

Es el texto más difícil. Una vida tan compleja, tan a fondo, tan protagonista de cambios sísmicos, que marcó décadas y abrió debates que se intuyen en las grietas pálidas que transitamos. Fue Julio Iglesias, fue Nixon, fue Facundo Quiroga con su poncho federal, fue Menem.

Un apellido simétrico, de resonancia de iniciados, una vida que transitó con intensidad toda la paleta ideológica del peronismo. Acaso la constante fue esa intensidad, esa audacia que lo hizo irrumpir en el teatro Lola Membrives y soportar una lluvia de escupidas, empujones y patadas en los tobillos, cuando la patota sindical manejaba el peronismo y ponía presidentes. Menem encabezaba la renovación. Era temerario, flaquito, a veces parecía pintón, duro y simpático al límite, acaso el político más carismático que haya tenido la Argentina desde la recuperación democrática.

Se cansaron de subestimarlo y se cansó de ganar elecciones. Confundía a Aristóteles con Sócrates, pero haciendo política era de la talla de Felipe González o Fernando Henrique, menos formado sí, pero alcanzó colinas hoy impensadas para un presidente de esta Argentina disminuida. El congreso en pleno de los Estados Unidos lo homenajeó en un largo, impensado aplauso de pie. El Pacto de Olivos nos sorprendió una mañana y tuvimos reforma de la Constitución. Era de esos políticos magos que sacan conejos un minuto antes de estrellarse. Fue un hombre de partido, hasta el último día. Al punto que es el único presidente peronista que surgió de una interna de verdad.

Fue miembro fundador de la renovación, para enfrentar a la patota sindical y después enfrentó a la renovación para ser Presidente, para después rescatarlos y terminar entregándoles el Gobierno. Llegó con el poncho federal y gobernó con los socialdemócratas de Cafiero, pero los puso al servicio de un proyecto neoliberal. Se llama conducción. Menem era un conductor, ese era su arte secreto.

Fue miembro fundador de la renovación, para enfrentar a la patota sindical y después enfrentó a la renovación para ser Presidente, para después rescatarlos y entregarles el Gobierno. Llegó con el poncho federal y gobernó con los socialdemócratas de Cafiero, pero los puso al servicio de un proyecto neoliberal. 

Como todo hombre o mujer importante tuvo su lado oscuro. La historia no es un cuento de hadas ni se detiene a preguntar quien es el bueno. Dio vuelta la Argentina, negoció con Kadafi, los Montoneros, indultó militares genocidas y los enfrentó a balazos, fue preso político y marcó el inicio institucional de la corrupción como mal endémico de la Argentina. Privatizó los servicios públicos, liquidó la inflación y nos metió en el mundo. Los números duros de sus diez años en el poder marcas cotas en crecimiento, inversión, PBI, inéditas. Pero también de pobreza y desocupación.

Con la tonada suave del norte y la mirada pícara desarmaba a los más enojados. Seducía. Todo el tiempo, todos los días. Fue el político nato. Lo odiaron por travestir al peronismo, pero más lo odiaron por ganar. Vivió la pelea con Clarín cuando las peleas de poder eran sólo eso y nadie hablaba de grietas. Clarín se equivocó con Menem y ahora lo extraña. Todos creían que volvía, pero apareció Kirchner.

Se convirtió en el hecho maldito del peronismo. Mancha venenosa. Recuerdo vergonzante. Pero los vio pasar a todos y como ex presidente tuvo una conducta que pocos de sus adversarios pueden exhibir. No habló. Se lleva los secretos de la Argentina. Murió en su ley, haciendo política con más de noventa años. Fue Menem. 

Publicar un comentario
Para enviar su comentario debe confirmar que ha leido y aceptado el reglamento de terminos y condiciones de LPO
Comentarios
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellas pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algun comentario violatorio del reglamento de terminos y condiciones será eliminado e inhabilitado para volver a comentar.
  • 14
    Ñancul
    16/03/21
    10:27
    visto lo que vino después, fue el último al que se le podía decir " SEÑOR PRESIDENTE "
    Responder
  • 13
    Ache Mariani
    22/02/21
    13:22
    De los presidentes peronistas sin duda alguna fue el mejor , el mas audaz y el mas inteligente. Lamentablemente en su gobierno hubo casos de corrupción notables , pero ello no llega a desmerecer el núcleo de su gestión presidencial .
    Responder
  • 12
    braveheart
    16/02/21
    13:14
    Tal vez, si hubiera conocido a otro economista antes de nombrar a cavallo, otro hubiera sido el destino de su gobierno!!
    Responder
  • 11
    enrique gil ibarra
    16/02/21
    08:03
    Muy buena síntesis. Una neutralidad periodística encomiable
    Responder
  • 10
    15/02/21
    22:58
    Los progresistas que colapsaron el país con la convertibilidad en el 2001 y que ahora están en el gobierno se rasgan las vestiduras con Carlos Saúl increíble la hipocresía de los progres idiotas!!!!
    Responder
  • 9
    15/02/21
    22:56
    p el plan de convertibilidad era de eduardo curia economistas peronista !!!! y estaba pensado por dos años y hasta tenía un equipo que se dedicaba a planificar como salir de la convertivilidad luego de dos años, menem se decidió por el plan bonex de cavallo (fracasado el de bunge y born) luego fracasado el plan de cavallo se reflota el plan de concertivilidad de curia (conocido en la época como plan de dolarización) al ser exitoso el ignorante de cavallo lo extendió y se cargó media industria argentina, es decir que lo único bueno del gobierno de menem vino de la cantera peronista y luego en su segundo mandato la única oposición real al modelo venís de las corrientes internas del peronismo!! ya que los radicales y progres siguieron con lo mismo (el candidato peronisra dhualde fue el único que planteo salir de la convertibilidad en las elecciones que ganó de la rúa) el segundo de curia era luis rappoport ! esto es de público conocimiento y los liberales de cotillón y progresistas, (no los que saben un mínimo de historia) le atribuyen el buen gobierno (el primero) de menem al liberalismo de cavallo , así de ignorantes son!!!! que aplicó un plan del peronismo ante el ultimátum de hacer algo de menem!! y lo termino mal y por más tiempo porque nunca entendió la convertibilidad que diseñaron los economistas peronistas dos años antes de su aplicación en el 89, ya que recién lo reflota cavallo en el 91 y lo vuelve un desastre al extenderlo mal!!!! la única verdad es la realidad!!
    saludos
    Responder
  • 8
    miguelitocorredor
    15/02/21
    22:44
    Un nivel de octava, grasa, pizza con champán.

    Solo será recordado por Grupo Clarin y algunos trasnochados más.

    Solo merece desprecio al igual que la Argentina entera.
    Responder
  • 7
    mirkobulje
    15/02/21
    16:20
    ley de punto final.... que nefasto el gobierno de la embajada esos 10 años, suerte que la gente lo hecho bien hechado, solo que el basurero de la democracia nunca hizo justicia, los jueces estan para eso, evitar que se haga justicia social
    Responder
  • 6
    yaxley15
    15/02/21
    13:31
    Excelente síntesis.
    Responder
  • 5
    nos falta mucho
    15/02/21
    10:27
    Tenés razón Fidanza....Menem dió vuelta la argentina..."y la volcó" gracias a él tenemos que leer a tipos como vos que cuando el neoliberalismo está en decadencia en el mundo, vos lo seguís idolatrando.
    Responder
Más de Ignacio Fidanza
 Gambito de Dama

 Gambito de Dama

Por Ignacio Fidanza
Villarruel se bancó con sonrisa venenosa el injuriante ataque de los trolls, y les devolvió con sonrisa espléndida el primer rechazo a un DNU presidencial.
Apareció el doctor Jekyll

Apareció el doctor Jekyll

Por Ignacio Fidanza
En un giro total de realpolitik Milei convocó a los gobernadores a un acuerdo. No es la primera vez que se modera justo antes de chocar.
Política gonzo

Política gonzo

Por Ignacio Fidanza
Milei va por la destrucción total de Juntos para quedarse con los restos. El stealth que amenaza su take over del macrismo.
Extinción

Extinción

Por Ignacio Fidanza
La irrupción de Milei complicó al peronismo, pero aún más a quienes lo apoyaron. El PRO teme repetir la suerte de la Ucedé. El radicalismo no encuentra su lugar bajo el sol.
La libertad no avanza

La libertad no avanza

Por Ignacio Fidanza
La caída de la ley ómnibus es un punto de quiebre en el sistema de conducción política de Milei.
La lección de anatomía

La lección de anatomía

Por Ignacio Fidanza
Milei, el admirador de Menem, hizo menemismo al revés. Entregó lo importante para proteger lo accesorio.