El contundente respaldo del FMI a la postura argentina fortaleció la posición del gobierno y en el mercado anticipan una oferta más agresiva hacia los acreedores privados que implicará mayores quitas.

Como explicó LPO, los bonistas sostenían que la deuda externa no es de la magnitud de la que habla el gobierno -cuestión que demostraban con sus análisis de sustentabilidad- y por lo tanto, exigían una negociación sin grandes concesiones.

Ahora, el comunicado del Fondo que declaró oficialmente que la deuda es "insostenible", legitima el discurso de Martín Guzmán y pone en aprietos la salida amistosa que proponían los acreedores.

Guiño al Gobierno: El FMI reconoce que la deuda argentina es "insostenible"

"Lo de ayer fue un fuerte aval a la Argentina. El tema es que ese aval le va a permitir hacer una oferta peor para los bonistas. Y eso te aleja de un acuerdo, lo que torna más riesgosos los bonos. Por eso la reacción de los mercados", explicó a LPO el analista financiero Christian Buteler.

En este marco es que las paridades de los bonos cayeron más de un 2% y el riesgo país avanzó un 4,10% para llegar a los 2.138 puntos básicos, un récord dentro de la era Alberto Fernández.

Si bien era sabido que el Fondo presionaba para los bonistas se lleven la peor parte de la renegociación, la novedad del comunicado fue el respaldo al sendero fiscal trazado por el gobierno, que recién aspira a llevar a un superávit para 2023, lo que genera incertidumbre respecto a la capacidad de pago.

"Lo que fue una señal negativa "inesperedada" para bonistas es que el Fondo comparte la visión de Guzmán en lo que respecta a que no habría margen político ni económico para hacer un ajuste fiscal más fuerte en el corto plazo, con lo cual en ese marco la exit yield esperada puede ser más alta", afirmó a este medio el director de Eco Go, Federico Furiase.