Una de las principales patas del ajuste en el gasto público nacional en miras a lograr el tan ansiado Presupuesto 2019 con déficit cero, será la transferencia de subsidios al transporte. Cómo reveló LPO en exclusiva, el Gobierno de Macri ya giró a los gobernadores el texto de la adenda al Pacto Fiscal que se espera que sea firmado por la mayoría de los mandatarios provinciales.

En el Ministerio de Transporte todavía están analizando los números finales, pero se calcula que serían unos $44.000 millones de ahorro fiscal para el año próximo. Los más perjudicados son los distritos oficialistas comandados por María Eugenia Vidal y Horacio Rodríguez Larreta, los cuales pasarían a hacerse cargo de $25.000 millones y $4.200 millones, respectivamente. Es por eso que la medida tendría el visto bueno de la mayoría de los gobernadores.

En la cartera de Dietrich enfatizan que "este traspaso es algo que pidieron los gobernadores" y que constituye algo completamente lógico dado que "hoy ya son regulados por las propias jurisdicciones locales, que determinan las tarifas y regulaciones y deciden sobre los temas de todos los días como los recorridos de las unidades, las frecuencias o la incorporación de flota nueva".

Sin embargo, como la mayoría del transporte público es de jurisdicción municipal, algunas provincias están amenazando con no poder afrontar este importe y transferirlo a cada municipio, lo que provocaría un fuerte incremento en el boleto de colectivos. Esto representa un serio problema para el gobierno nacional de cara a un año electoral donde pretenderá bajar la inflación alrededor de 20 puntos. A su vez, al ser uno de los componentes más importantes de la canasta básica de los sectores populares, podría complicar seriamente el termómetro del humor social.

"No podemos hacernos cargo, son 60 millones de pesos, lo que para una provincia de 180.000 habitantes es un montón de plata. Vamos a pasarlo a los municipios y veremos si podemos ayudarlos con algo", aseguraron a LPO desde Tierra del Fuego.

Esta también es la postura de Chaco, Tucumán, San Luis y La Pampa. El Vicegobernador chaqueño Daniel Capitanich ya avisó que sin subsidio el boleto subirá en torno a los $35 -al no afrontar los correspondientes $700 millones anuales-, mientras que el tucumano Juan Manzur (al que le transferirán un gasto por alrededor de $2.000 millones) había advertido que la tarifa de los colectivos podría pasar de $12,50 a entre $34 y $36.

En Santa Fe, por su parte, se mantienen cautos y sostienen que aún persisten las conversaciones con Frigerio, por lo que nada está definido. "Nosotros hemos pedido suspender la rebaja de ingresos brutos a los bancos, pero el gobierno no está de acuerdo con ello", subrayó a este medio el Ministro de Economía Gonzalo Saglione.

De acuerdo al titular de Economía, como cada ciudad santafecina presenta una dinámica de costos propia, no se puede prever la dimensión de una posible suba tarifaria. Sin embargo, por ser uno de los distritos que recibe de los mayores montos de subsidios ($3.600 millones), no cabe duda que el impacto se hará sentir en el bolsillo. En Rosario ya empezaron a hacer cálculos y la Secretaria de Transporte, Mónica Alvarado, indicó que la quita de subsidios equivaldría a 8 pesos por pasajero por boleto, lo que lo llevaría de $18 a $26.

Córdoba es otro caso particular, donde existe una fuerte puja entre el Gobernador Juan Schiaretti y el intendente capitalino Ramón Mestre. En su reciente visita a la redacción de LPO, Mestre denunció que "el gobernador no pondrá ni un peso para los subsidios" que hoy superan los $3.600 millones. Al parecer, la provincia solamente se haría cargo de los servicios interjurisdiccionales, lo que aliviaría a la mayoría de los municipios, excepto a la capital cordobesa. Con un millón y medio de habitantes, el impacto de esta medida sobre la ciudad comandada por Mestre no será menor, justamente en un año donde el alcalde radical intentará arrebatarle la gobernación a Scharetti.

"Si yo tengo que trasladar eso a las tarifas de transporte, será muy costoso para los que menos tienen, que son quienes usan en su mayoría el sistema de transporte público", remarcó Mestre.

Otro de los distritos más afectados al tener una población significativa es Mendoza. Como se esperaba, desde la gobernación radical confirmaron que se harán cargo de los $1.300 millones requeridos para mantener los precios del transporte y manifestaron a LPO que como contraparte tendrán un aumento de coparticipación por la recomposición de bienes personales y suba de retenciones.

Por su parte, la Nación seguirá afrontando los subsidios correspondientes a todos los trenes y a los colectivos que conectan dos jurisdicciones provinciales distintas.