Arturo Zaldívar salió de la Corte Suprema cuando tuvo la certeza de que Clara Brugada iba a ser la elegida para la contienda por la CDMX. El ministro entendió que debía adelantarse a los tiempos y ganar posiciones con Claudia Sheinbaum. Así se lo recomendaron desde Palacio Nacional.

Zaldívar, contrario a lo que dijo en una entrevista por demás amena en Radiofórmula, quiere cargos, quiere estar en la política y entiende que la 4T es el vehículo ideal. De ahí su estrecha cercanía con Andrés Manuel López Obrador y su Gobierno.

En los pasillos del máximo tribunal circula el comentario ácido de que Zaldívar ha pasado tanto tiempo con el presidente que ya comparte hasta sus fobias: cuando se cayó la extensión de su mandatado como presidente de la Corte , lo primero que dijo fue que la embajada de Estados Unidos había cabildeado en su contra.

El ahora ministro saliente quiere ser fiscal general pero teme que Omar García Harfuch aspire a esa pretensión como premio de consolación por bajarse de la pelea por la capital. Como informó esta redacción, García Harfuch no está ni demasiado interesado en ser senador y solo aceptaría ser secretario de Seguridad Pública si puede controlar la Guardia Nacional lo cual abre un conflicto con la Sedena.

En su conversación con el animador Ciro Gómez Leyva el abogado también dijo que respetaba a Alejandro Gertz Manero y que a este le quedaba todavía mandato como fiscal. Es cierto que tiene afinidad y cuando estalló el conflicto entre Julio Scherer y el fiscal, Zaldívar, que era muy cercano al ex consejero jurídico, se alineó un poco más cerca de Gertz. 

Pero lo que también es una realidad es que Zaldívar pretende desplazar a Gertz antes de que concluya su mandato. En lo posible el año que viene. Hay antecedentes cercanos: en enero de este año cuando había rumores sobre la salud de Gertz, el ministro le pidió el cargo a López Obrador. Uno de los argumentos era que podía proteger a Scherer de cualquier embestida judicial de Gertz.

Y es que la política le cuesta a Zaldívar, tan acostumbrado al mundo vertical de los tribunales. En los últimos meses se asoció fuertemente con Adán Augusto López Hernández a quien le cedió incluso a su operador judicial Carlos Alpizar. El ministro llegó a ver chances en la aspiración presidencial de Adán Augusto pero ese proyecto se erosionó a gran velocidad y por estas horas le cuesta posicionar un candidato en la alcaldía de Centro, Tabasco.