Todavía no hay fecha, pero el objetivo es que Joe Biden aparezca en campaña, escoltado por Barack Obama y Bil Clinton, dos presidentes demócratas que lograron la misión de ser reelectos. La campaña de Biden está organizando un acto de recaudación de fondos en primavera con un doble objetivo. El primero es muy concreto y accesible, que el ex presidente exhiba el respaldo de dos demócratas que gobernaron durante dos mandatos para recolectar apoyo económico. El segundo es más ambicioso, que Biden se impregne del aire de victoria que en su momento acompañó tanto a Obama como a Clinton.

La aparición de Biden con dos ex presidentes sería la primera de su tipo y se proyecta para los meses de marzo o abril, durante la primavera. Los funcionarios de la Casa Blanca esperan que el acto sea lucrativo y sirva para conseguir donaciones grandes y pequeñas. Pero también que acapare los titulares y funcione como energizante para los votantes demócratas que hasta ahora no han mostrado entusiasmo por la reelección de Biden.

Biden cede a la presión de Obama y decide intervenir su comando de campaña con funcionarios de la Casa Blanca

La campaña de Biden espera que el trío presidencial ayude a movilizar a la base del partido. Marzo será un mes decisivo porque el 5 de marzo es el SuperMartes y Donald Trump espera verse consagrado como candidato a presidente republicano a más tardar en esa fecha. 

Según publicó NBC News, una posibilidad es que Biden aproveche la aparición con Obama y Clinton para lanzar su campaña contra Trump y se estudia la posibilidad de que lo haga en el discurso sobre el Estado de la Unión, que está programado para principios de marzo. La campaña de Biden ya tiene decidido lanzar una campaña publicitaria multimillonaria para remarcar la amenaza que podría representar el regreso de Trump al poder.

APAndrew Harnik

Tanto Clinton como Obama siguen siendo populares entre los demócratas y son, de hecho, más populares que Biden. Los colaboradores del presidente explican la diferencia con el argumento de que los expresidentes generalmente tienden a disfrutar de una mayor aprobación de los estadounidenses. Sin embargo, no todos piensan lo mismo.

El índice de aprobación de Biden en el tercer año de su presidencia mientras hace campaña para la reelección es más bajo que el de Obama y Clinton en este mismo momento de sus presidencias. Esas cifras resaltan el desafío que enfrenta Biden con los votantes este noviembre.

El índice de aprobación de Biden en el tercer año de su presidencia mientras hace campaña para la reelección es más bajo que el de Obama y Clinton en este mismo momento de sus presidencias.

Sin embargo, los asesores del presidente remarcan la vitalidad de los indicadores de la actividad económica en Estados Unidos y están euforicos por el crecimiento de la econmomía en un contexto en el que la Reserva Federal mantiene elevadas las tasas. 

Para evitar el regreso de Trump al poder, Obama se lanza a recaudar millones en la campaña de Biden

La Casa Blanca está convencida de que Biden cerrará el gap que distancia su imagen personal de los indicadores de la economía y cree que en los próximos meses logrará elevar en forma ostensible su índice de aprobación. Los asesores del presidente trabajan para que Biden se involucre en forma personal con los anuncios sobre la mejora económica y confian en que el resultado vuelva a sorprender a los escepticos, como sucedió en 2022, cuando los demócratas hicieron una elección muy superior a la que se esperaba.

El plan de la aparición conjunta de los ex presidentes tiene, sin embargo, una contraindicación: Obama y en especial Clinton pueden disgustar a los republicanos moderados que en 2020 se inclinaron en forma manifiesta en favor de Biden y en rechazo a Trump.