YPF cambió las condiciones para la reestructuración de la deuda corporativa luego de que fondos de inversión y bancos rechazaron la rechazaran y la calificaran de hostil por el mecanismo de aceptación.

Por lo tanto, el canje de los bonos ya no se hará replicando los pasos de la Ley de Sociedades de Argentina sino que se hará siguiendo una suerte de cláusula de acción colectiva que garantice que al menos el 50% de los acreencias de cada una de las siete series aceptan la propuesta y ya no con el voto de más de la mitad de las siete obligaciones negociables que se presentaran en la Asamblea de acreedores. Es que la Ley de Sociedades exige para darle validez a la Asamblea un quórum del 60% en un primer llamado y, en caso de no lograrse, en un segundo llamado basta con que se presente solo el 30%.

Este mecanismo no se parece en nada a las cláusulas de acción colectiva que rigen para activos como los bonos soberanos bajo Ley Nueva York y los acreedores directamente lo calificaron de "hostil" y de maniobra malintencionada por incorporar en la letra chica de las ONs bajo ley extranjera el mecanismo de la Ley de Sociedades.

YPF empezó la negociación de su deuda en un clima de tensión con los bancos

Fuentes del mercado explicaron a LPO que en la práctica esto quiere decir que toda ausencia de voto respecto del canje será considera como negativo para la solicitud de consentimiento que presentó la petrolera la semana pasada y que tiene por primera fecha límite el próximo 18 de enero.

Hasta este lunes inclusive, los acreedores que acepten la propuesta podrán recibir a cambio de sus bonos, nuevas obligaciones negociables con vencimiento hasta 2029 y un pago en efectivo. La cancelación en efectivo no rige para quienes acepten entrar al canje después del 18 de enero.

Cabe aclarar que la oferta económica no cambió y sigue vigente como fue presentada la semana pasada. Mientras tanto, las conversaciones con los acreedores continúan.