La hecatombe de hoy miércoles en Palacio Nacional, generada por las protestas de los familiares de los normalistas desaparecidos en Ayotzinapa en 2014, fue el peor reclamo que vivió Andrés Manuel López Obrador desde que es presidente.
Según pudo conocer LPO, el tabasqueño cree que detrás de las reacciones cada vez más enérgicas de los familiares, se encuentra un interés extranjero que no serÃa la OEA sino, una vez más, la DEA, la misma agencia de EU a la que el presidente culpa por las notas de prensa que hace un mes aparecen sobre una presunta vinculación de su familia con el crimen organizado.
López Obrador está convencido de que la agencia que dirige Anne Milgram quiere desestabilizar su administración y que desde allà se les ha facilitado información a los familiares referida al papel de la Sedena en esa noche fatÃdica que hundió al gobierno de Enrique Peña Nieto.
Según esta lógica, la DEA ha instalado al grado de certidumbre, entre los familiares, que el Ejército esconde información sobre la desaparición.
El mandatario cree que Alejandro Encinas suscribe las teorÃas de la DEA y de ahà su salida de Segob. Encinas quedó atrapado en una contienda que ha dominado la polÃtica de seguridad de este sexenio: por un lado, los militares encabezados por Salvador Cienfuegos y por el otro lado la DEA, que intentó encarcelar al ex mandamás del Ejército.
De este modo, Ayotzinapa se convierte en otro foco de tensión en la relación bilateral con la Casa Blanca de Joe Biden.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.