En el PRD las tensiones por el 2018 llegaron hasta la Ciudad. En medio del temor por perder las riendas de uno de los territorios que aun conservan, los manotazos se esparcieron desde el Palacio de Donceles hasta el Zócalo, a través de uno de sus principales operadores políticos: el diputado Mauricio Toledo.

Los hechos hablan por si solos. El domingo, el equipo del legislador envió una invitación a una conferencia de prensa para anunciar su supuesta salida del Sol Azteca, que ayer negó vía redes sociales. 

Para quienes siguen la política de la Ciudad, el "amago" -luego negado por su entorno- fue un claro mensaje especulativo. Quienes conocen las grillas de Toledo saben perfectamente que quiso enviar un mensaje directamente a Héctor Serrano y el propio Miguel Ángel Mancera.

"El problema empezó cuando Toledo deslizó que para la Ciudad el PRD necesitaba un candidato afiliado al partido. Eso fue intencionado, una critica a la dirigencia que rodea Mancera. Ellos recibieron enseguida el desaire y, a través de Serrano, le marcaron limites en sus declaraciones", señalaron fuentes de la Asamblea Legislativa. 

Como todos los caciques del PRD, Toledo forjó una relación de tensa amistad con Serrano. Su rol en la bancada del Sol Azteca en la Asamblea Legislativa -se quedó con la siempre importante Comisión de Presupuesto- mucho tuvo que ver con la necesidad de mantener cerca al hombre que todavía maneja los hilos de Coyoacán.

En el Gobierno de Mancera ya están al tanto de las reuniones que tuvo Toledo con Ricardo Monreal. Como explicó La Política Online, el delegado de la Cuauhtémoc es el encargado de conectarse con los liderazgos de otros partidos que quieren tender puentes con Morena. 

LPORodrigo González Olivares

Son varios los diputados que piden en voz baja que Mancera baje su pretensión presidencial para lograr una alianza con Andrés Manuel López Obrador. Creen que así podrían retener parte del poder que todavía ostentan en sus territorios. Allí aparece Elizabeth Mateos, ex delegada de Iztacalco o Víctor Hugo Romo, que aspira a recuperar la Miguel Hidalgo. 

Perder también a Mauricio Toledo sería un golpe más, después de las partidas de Miguel Torruco y Leticia Quezada, entre otros. Por eso la reacción de Serrano fue instantánea para contener al hombre de Nueva Izquierda. 

En el fondo del debate aparecen las intenciones de Mauricio Toledo y Leonel Luna -entre otros- de posicionar a un hombre perredista para la sucesión. "El razonamiento es sencillo: para hacer crecer a un Chertorivski, que nada tiene que ver con la tradición política de la Ciudad, ¿por qué no apostar por un perfil propio?", explicaron a LPO desde la Asamblea.