La victoria tiene muchos padres y la derrota es huérfana, dice el dicho. Es huérfana hasta que alguien le pone nombre y apellido a los responsables. Este fue el caso del líder capitalino del PRD, Raúl Flores, quien -a través de un comunicado- pasó factura a Miguel Ángel Mancera tras la victoria de Morena en la Ciudad de México.
"El gobierno de Miguel Ángel Mancera (primer jefe de gobierno no militante del PRD, respaldado por Marcelo Ebrard y López Obrador) también fue castigado por los capitalinos, quienes durante los tres últimos años de gobierno le dieron una evaluación negativa especialmente en materia de seguridad, movilidad y desarrollo urbano", explicó Flores.
"Todos los partidos en el gobierno sufrieron un revés electoral de diferente magnitud y recibieron el voto de castigo de la ciudadanía", agregó el perredista.
Aunque aseguró que tampoco ayudó el que Mancera no fuese "percibido como un contrapeso del gobierno priista de Peña Nieto", sino todo lo contrario. "Este voto de castigo lo pagó el PRD en las urnas", insistió el dirigente solaztequista.
Mancera, por su parte, en estos momentos se alista para tomar posesión de una curul en el Senado de la República por el Partido Acción Nacional.
Igualmente, en opinión de Flores García, este 1 de julio del 2018 concluyó un ciclo para el Sol Azteca en la CDMX. Luego de gobernar por 21 años la capital, además del "voto de castigo" en contra de Mancera Espinosa, seis razones más propiciaron el fracaso de Alejandra Barrales frente a Claudia Sheinbaum; entre ellas, "los errores y desencuentros al interior de la primera Comisión de la Reconstrucción, y la tardía y obstaculizada respuesta del gobierno local hacia los damnificados".
"No pudimos comunicar ni hacer atractivo a nivel de tierra el significado de la propuesta de un Gobierno de Coalición, se percibió solamente como una alianza electoral y no como una oferta de gobierno integral, plural, mucho más transparente por los contrapesos", subrayó Flores, quien también detalló que Andrés Manuel López Obrador utilizó la fuerza política y territorial del PRD para dividir a la izquierda y construir Morena y ganar las elecciones.
La inercia del voto para AMLO en la capital, continúa el comunicado, alcanzó para la gran mayoría de sus candidatos a diputados, alcaldes y a la jefatura de gobierno. Además que la "descomposición interna" del Sol Azteca "como resultado de la rivalidad entre las diferentes corrientes y los cacicazgos en las delegaciones", "obstaculizaron la toma de decisiones para permitirnos seguir evolucionando con la formación de nuevos cuadros y evitar controles territoriales excesivos".
Pero "aunque este 2018 concluyó un ciclo" para el PRD, "continuaremos nuestra lucha por los dos objetivos y razones que nos dieron origen: abatir la desigualdad y desterrar el presidencialismo".
Finalmente, Flores terminó el texto con una cachetada con guante blanco contra Sheinbaum Pardo y el partido Marrón. "No solo están con Morena la mayor parte de los ex perredistas, sino también una buena parte de los integrantes del gobierno actual. Hecho que traduce en una ironía nuestro segundo punto (el voto de castigo de la ciudadanía al gobierno de Mancera). Pues hoy los capitalinos podrán encontrar parte de ese gobierno en su nueva opción política".
