Vox no frena su hemorragia. La renuncia de Iván Espinosa de los Monteros, portavoz en el Congreso y uno de los fundadores del partido, ha destapado una olla a presión que, a esta altura, ya pone en jaque el liderazgo de Santiago Abascal.

En las últimas horas se confirmó otra salida, la de Juan Luis Steegmann, número seis de la lista por Madrid y sustituto automático de Espinosa de los Monteros. Según adelante el medio Libertad Digital, este dirigente también se niega recoger el acta de diputado, por lo que tiene decidido dejar sus cargos y no formar parte del grupo parlamentario de la ultraderecha.

"Vox no tiene futuro": el lapidario vaticinio de un exdiputado tras la salida de Espinosa de los Monteros

Steegmann, reputado médico de profesión, fue una de las figuras más controversiales de Vox en la última legislatura, sobre todo en la primera parte, durante la crisis de la Covid-19, por defender las vacunas y recibir fuertes reproches internos por parte de la militancia negacionista de la formación.

La renuncia a su escaño supone la vuelta al Congreso de Carla Toscano, número 7 en la candidatura por Madrid, otra dirigente de perfil alto. Ganó atención mediática en varias oportunidades en el ciclo legislativo ya finalizado, entre otras cosas por afirmar desde el atril que el único mérito de la ministra de Igualdad, Irene Montero, era "haber estudiado en profundidad" a Pablo Iglesias, su pareja y fundador de Podemos.

Carla Toscano, la dirigente que deberá asumir el escaño vacío de Vox.

Europa Press

LPO dio a conocer que Mazaly Aguilar, la afiliada número 8 del partido, eurodiputada y dirigente que también formó parte de la línea fundadora, también está en la mira de Jorge Buxadé, representante de la corriente más ultra, hoy el segundo miembro del partido con más poder después de Abascal.

Vox entierra su ala liberal y expulsa a Iván Espinosa de los Monteros, víctima de la corriente ultracatólica

Las salidas del Espinosa de los Monteros y de Steegmann fueron forzadas pero voluntarias. Otras, en cambio, fueron forzadas, como las de los diputados Víctor Sánchez del Real y Rubén Manso, hombres de confianza de Espinosa de los Monteros y militantes de la primera época, excluidos por Buxadé de las listas electorales. 

Tras oficializarse el alejamiento del principal exponente de la corriente liberal, estos dos exlegisladores rompieron el silencio y encendieron el ventilador.

Manso vaticinó que "Vox no tiene futuro" y lamentó que el partido haya caído en "la caricatura" que desde fuera hacen sus detractores. A su juicio, Buxadé y Abascal se están portando "como adolescentes" castigando a sus padres (en referencia a los dirigentes fundadores).

 Mazaly Aguilar, la afiliada número 8 de Vox que estorba a Buxadé en la feroz crisis interna del partido

"Vox va camino a transformarse en primer partido de la derecha no convencional que fracasará en Europa", sentenció.

Sánchez del Real puso otro ejemplo de la censura que se está imponiendo desde la cúpula del partido. Mencionó a la eurodiputada Mazaly Aguilar como otro "canario en la mira" y confirmó que está "silenciada" en Bruselas por parte de la fracción que encabeza Buxadé.

"Primero se terminó con la democracia interna. Luego se prescindió de gente que lo dio todo por Vox desde el inicio como Mazaly Aguilar", cuestionó.