El País Vasco se vio envuelta en 200 marchas con los presos de ETA como protagonistas organizada por la red ciudadana en donde el principal reclamo fue el fin de la política de excepción contra los detenidos.

Esto generó indignación y repudio de parte de los partidos de derecha y diversos colectivos.  El consejero de la Asociación Víctimas del Terrorismo, Miguel Folguera, hizo un llamamiento público para que el delegado del Gobierno en el País Vasco, Denis Itxaso, solicitara la prohibición de las convocatorias.

 Lamentó que el año empiece  "con actos proetarras en todos los pueblos", por eso pidió a la delegación del Gobierno la prohibición de estas movilizaciones "que tanto humillan a las víctimas del terrorismo". Idéntica petición llegó ayer a la Delegación del Gobierno en Navarra desde el Ayuntamiento de Tudela, donde los simpatizantes abertzales tienen previsto concentrarse a partir de las cinco de la tarde. El consistorio de la rivera navarra envió una carta al delegado del Gobierno en Navarra, José Luis Arasti, pidiéndole que impida la celebración del acto a favor de los presos etarras.

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En el escrito invoca el artículo 61 de la Ley 29/2011 de Reconocimiento y Protección a las Víctimas porque cree que el objetivo de la convocatoria "no es otro que ensalzar a quienes han sido condenados por pertenecer o colaborar con ETA".  

Ni a los terroristas de Bataclan en París, ni a los de las torres de Nueva York, ni a los del mercado en Berlín se les homenajea en las calles de Francia, Estados Unidos o Alemania

"Ni a los terroristas de Bataclan en París, ni a los de las torres de Nueva York, ni a los del mercado en Berlín se les homenajea en las calles de Francia, Estados Unidos o Alemania", criticó en Twitter el presidente del PP vasco Carlos Iturgaiz. Lamentó que esto, sin embargo, sí ocurra en España porque si bien "Bildu pide su excarcelación", PNV y PSE "lo facilitan en los despachos".

Según datos de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), el Gobierno de Sánchez desde 2018 hasta 2021 ha facilitado 288 traslados que beneficiaron a 202 etarras. 97 de los ex terroristas a los que se realojó en prisiones vascas habían sido autores de delitos de sangre. En la actualidad, el 85% de los 175 presos de la banda se encuentran en cárceles de Euskadi y Navarra o situadas a menos de 300 kilómetros de estas dos comunidades autónomas. Tras los últimos 7 acercamientos anunciados por Instituciones Penitenciarias el pasado 30 de diciembre, en este mes de enero habrá más etarras (hay traslados aún en proceso) en Euskadi y Navarra que en el resto de España.

Los portavoces de la red ciudadana SARE, Joseba Azcarraga, y Arantza Aldezabal, intervienen en la concentración convocada por Sare a favor de los presos de ETA.

Sare y Etxera, las dos organizaciones que presionan en la calle para lograr el objetivo principal de Arnaldo Otegi de sacar a "los 200 presos" de las cárceles, exigen el traslado a Euskadi de todos los presos de la banda «sin excepción ni demora» y el "desbloqueo del segundo al tercer grado" convertido en el puente para salir de las cárceles vascas en manos del PNV desde el 1 de octubre de 2022.

Portavoces de Sare han reconocido públicamente que están esperanzados  ante el papel que podrá jugar el Gobierno de Urkullu para facilitar estos cambios de grados que, como establece la Ley 7/2003 de Medidas de Reforma para el Cumplimiento Íntegro y Efectivo de las Penas requiere de la «colaboración activa con las autoridades» por parte de los presos que han formado parte de organizaciones terroristas como ETA.