Mientras las tropas israelíes intensifican su invasión terrestre de Gaza y el número de muertos palestinos supera los 10.000, los demócratas ven crecer una vez más la división interna. Al son de las protestas que cada vez cuestionan a más líderes, el punto de mira se ha puesto en los representantes progresistas. Los referentes políticos de los manifestantes pro Palestina no están siendo suficientemente contundentes según los activistas y les acusan de estar traicionado a la causa. Este es el caso de líderes como el senador Bernie Sanders o la congresista Alexandria Ocasio Cortez, que enfrentan una situación nunca antes vista: sus nombres coreados en las multitudinarias marchas de Nueva York como traidores.

Sanders vió como manifestantes ocupaban su oficina pese a que pidió en su momento un alto el fuego entre Israel y Hamás. Los activistas cuestionan al senador judío que elogia a Estados Unidos por ofrecerse a apoyar a Israel en su contraataque. Sanders forma parte de un grupo de legisladores progresistas que han enfrentado reacciones violentas por su respuesta a los ataques de Israel y su electorado le reprocha que no tenga una voz más crítica con la situación en Oriente Medio. "Estados Unidos debe dejar en claro que, si bien somos amigos de Israel, existen condiciones para esa amistad y que no podemos ser cómplices de acciones que violen el derecho internacional y nuestro propio sentido de la decencia", afirmó el senador.

El Partido Demócrata se encuentra dividido sobre la respuesta estadounidense al conflicto. A medida que los llamados a un alto el fuego ganan fuerza entre sus partidarios, muchos demócratas siguen alineados con Israel, como el alcalde de Nueva York Eric Adams o la gobernadora Kathy Hochul. 

Máxima tensión entre los demócratas por el crecimiento de las manifestaciones pro palestina en Nueva York

Hace un mes, al iniciarse la respuesta popular en forma de grandes concentraciones de denuncia a Israel y el apoyo estadounidense al gobierno de Benjamin Netanyahu, el foco de los ataques eran los demócratas moderados en el poder, como el propio presidente Joe Biden o los máximos líderes en Nueva York. Ahora se cuestiona a los políticos más a la izquierda por no hacer condenas contundentes y respaldar las manifestaciones.

La fundadora del grupo que organiza las protestas pro Palestina en Nueva York, Nerdeen Kiswani, comentó a LPO que ya no vale fingir una preocupación con lo que está sucediendo. "Se han pasado el último mes y medio ignorando a los miles de civiles palestinos asesinados en Gaza. Su política no es que no haya muertes de civiles palestinos, es simplemente: ‘Ojalá, menos muertes de civiles palestinos' mientras las bombas siguen cayendo", apuntó Kiswani.

Sanders vió como manifestantes ocupaban su oficina pese a que pidió un alto el fuego entre Israel y Hamás. Los activistas cuestionan al senador judío que elogia a Estados Unidos por apoyar a Israel en su contraataque.

"Incluso antes de esta repetición del genocidio en Gaza, Estados Unidos había enviado más de 3.800 millones de dólares al año a Israel, gran parte de los cuales se utilizan para perpetrar violencia contra los palestinos; Estados Unidos continúa enviando ayuda de todos modos", agregó. Para Kiswani, hacerlo valida la violencia contra los palestinos no sólo en los territorios ocupados sino también en Estados Unidos. Por eso, la activista reclama un alto el fuego inmediato y permanente y el fin de la financiación de Estados Unidos para el gobierno israelí.

Alexandria Ocasio-Cortez.

APJacquelyn Martin

Conscientes del peso político de las demandas en la calle, los líderes progresistas como AOC piden el alto al fuego y poner fin a los ciclos de violencia, a la vez que buscan aparecer en actos con la comunidad judía de izquierda. Ocasio-Cortez se unió a un grupo de rabinos para el alto al fuego y lo mismo hizo otra aliada de la congresista en Nueva York, la asambleísta Kristen Gonzalez. "Tuve el placer de participar en una Ceremonia de Iluminación Navideña judía, en la primera noche de Hanukkah, donde el rabino Wineberg habló tan bellamente sobre la importancia de la luz en tiempos de oscuridad", dijo Kristen a LPO.

Si por un lado los políticos progresistas se enfrentan al escrutinio de su electorado potencial, al mismo tiempo, los miembros del llamado "Escuadrón" que encabeza AOC van a tener que hacer frente a un poderoso grupo proisraelí que intentará derrocar a estos miembros liberales en las elecciones del próximo año. El escenario es complicado. Las condenas a la respuesta de Israel al ataque de Hamás del 7 de octubre enfurecen al lobby pro israelí e indignan al mismo tiempo a los simpatizantes pro Palestina que los ven tomados por la cautela.

El Comité de Asuntos Públicos Estadounidense-Israelí, según Político, está buscando rivales para que se enfrenten a algunos miembros del squad y planea destinar más de 100 millones de dólares para derrotarlos.

Una histórica marcha contra el New York Times por su cobertura de la guerra potencia la división entre los demócratas

Uno de las integrantes del Escuadrón, la política y abogada demócrata de 47 años, Rashida Talib, ha sido objeto de censura por sus comentarios sobre la guerra entre Israel y Hamas. La única legisladora palestino-estadounidense vió como 22 miembros de su Partido Demócrata respaldaban la resolución en su contra por "promover narrativas falsas" sobre el ataque de Hamas que mató a más de 1.400 personas. También fue acusada de buscar la "destrucción de Israel", acusación que ella rechazó.

El escenario es complicado. Las condenas a la respuesta de Israel al ataque de Hamás del 7 de octubre enfurecen al lobby pro israelí e indignan al mismo tiempo a los simpatizantes pro Palestina que los ven tomados por la cautela.

La rara votación encontró un problema con la aceptación por parte de la congresista demócrata del lema "Del río al mar, Palestina será libre", un cántico que según los que cuestionan a Talib es ampliamente reconocido como un llamado genocida a la violencia para destruir el Estado de Israel y su pueblo.

Talib fue, junto con Ilhan Omar, otra miembro del escuadrón progresista y una de las dos primeras mujeres musulmanas elegidas para el Congreso. El caso de la congresista de Michigan es también relevante ya que representa a un estado con una gran comunidad musulmana-estadounidense frustrada con el manejo de la guerra por parte de Biden, y algunos estrategas políticos creen que eso podría costarle el crítico estado indeciso.

La división dentro del grupo demócrata refleja un debate nacional que los republicanos creen que pueden utilizar a su favor en las elecciones del próximo año. La política estadounidense hacia Israel bien podría convertirse en una cuestión determinante para los votantes en 2024, similar al aborto o las armas.