A último momento, Bob Menéndez dio un golpe de timón y confirmó que su poder todavía existe. El senador latino que presidió hasta hace poco el influyente Comité de Relaciones Exteriores impidió la confirmación del Senado de dos candidatos de Joe Biden para el área de Agricultura. Menéndez bloqueó las nominaciones de Basil Gooden como subsecretario de desarrollo rural del Departamento de Agricultura (USDA) y Summer Mersinger como titular de la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos.

Aunque se trata de dos funcionarios que no despiertan mayor resistencia, Menendez sorprendió a la administración Biden cuando decidió golpear de manera imprevista. En el entorno del senador cubano-americano, que viene de ser procesado en un escándalo por sobornos, argumentan que la jugada fue un mensaje directo a Biden. Se debe, según dijeron, a la "falta de respuesta" de la administración Biden hacia Menéndez y otros miembros del Caucus Hispano del Congreso durante las conversaciones con los republicanos en torno a la migración. En especial, a las negociaciones para aprobar un proyecto de ley de gasto suplementario para la ayuda de Ucrania a cambio de fondos para la seguridad fronteriza.

Gooden y Mersinger quedaron excluidos del paquete de confirmaciones de fin de año del Senado y tendrán que esperar varios meses para asumir su cargo. Las dos nominaciones debían ser confirmadas mediante votación oral en el Senado el miércoles por la tarde, pero el senador de Nueva Jersey se opuso justo antes. Así frustró el esfuerzo de la administración Biden por acelerar las confirmaciones y dejó a los senadores sin tiempo para reorganizarse antes del receso de las fiestas y las vacaciones.

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Un dato resulta ineludible: los dos están bajo la jurisdicción de la presidenta del Comité de Agricultura del Senado, Debbie Stabenow, una de las primeras demócratas en pedir la renuncia de Menéndez por corrupción. Según The Hill, los conocedores del conflicto afirman que se trata de una represalia contra Stabenow, que además de estar a cargo de Agricultura, representa a Michigan y es la demócrata número 3 del Senado.

El Caucus Hispano del Congreso cuestiona a Biden y a la Casa Blanca por aceptar las imposiciones del Partido Republicano y negociar una nueva política fronteriza como parte de un paquete de ayuda exterior más amplio para Ucrania e Israel. Menéndez quiso mostrar su "insatisfacción" con la actual respuesta de la administración en la frontera.

Según la versión oficial, el golpe de fin de año de Menéndez a Biden se debe a falta de respuesta de la administración demócrata a los planteos del cubano-americano durante las conversaciones con los republicanos en torno a la migración.

Stabenow fue la primera integrante del liderazgo demócrata del Senado en pedir la renuncia de Menéndez luego de su acusación federal por soborno y otros cargos. Tal como contó, los fiscales que dependen del Departamento de Justicia acusan a Menéndez por tráfico de influencias. Sostienen que Menéndez y su esposa aceptaron cientos de miles de dólares en efectivo, lingotes de oro y otros sobornos a cambio de utilizar el puesto del senador para beneficiar a socios comerciales y al gobierno de Egipto.

El poder que mostró Menendez en la comisión de Agricultura tiene, sin embargo, su contracara más dura en su grupo más cercano de colaboradores. Según publicó el New Jersey Globe, lo acaba de abandonar la histórica recaudadora de fondos del senador cubano-americano, Samatha Maltzman. Principal recaudadora de fondos para su campaña y para su fondo de defensa legal, la directora financiera de Menéndez desde 2010 también renunciará al PAC Nuevo Milenio dirigido por el senador latino.

AP

Se trata de una pérdida de enorme relevancia porque Maltzman había trabajado antes para la campaña presidencial de Hillary Clinton, los senadores estadounidenses Cory Booker, Frank Lautenberg y el representante Rush Holt. Así como no dudó en permanecer al lado de Menéndez durante su juicio federal por corrupción en 2017, esta vez decidió dar un pasó al costado.

Se trata de la última integrante del principal equipo político de Menéndez en retirarse. Antes lo habían hecho Michael Soliman, su principal asesor político durante dieciséis años, y Brad Lawrence y Steve DeMicco de Message and Media, consultores políticos de Menéndez desde la década de 1990.

La caída de Bob Menéndez genera un vacío en el poder latino que recauda millones en campaña

La recaudación de fondos de Menéndez se ha desacelerado dramáticamente desde su acusación del 22 de septiembre por cargos federales de corrupción. Dos semanas después de que el Departamento de Justicia anunciara sus cargos contra el senador de tres mandatos, se cancelaron la mitad de las habitaciones de hotel en un costoso resort en Puerto Rico donde se llevaba a cabo la recaudación de fondos de Menéndez.

Samatha Maltzman, su histórica recaudadora de fondos, lo acaba de abandonar después de 13 años. Recaudadora para su campaña y para su fondo de defensa legal, la directora financiera de Menéndez también renunciará al PAC Nuevo Milenio dirigido por el senador latino.

Una encuesta de la Universidad de Stockton sitúa sus índices de aprobación en un 8%, y una encuesta de la Universidad Fairleigh Dickinson publicada en octubre pasado mostró que el 70% de los habitantes de Nueva Jersey y el 71% de los demócratas quieren que Menéndez renuncie. Peor aún para Menéndez, hijo de inmigrantes cubanos, el 71% de los hispanos dijeron que debería renunciar.