La Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) informó esta mañana, a través de un comunicado, que el gremio decretó el "estado de alerta y movilización", al tiempo que anunció "paros sorpresivos" para las próximas semanas, que afectarán los vuelos de Aerolíneas Argentinas y Austral.

"No vemos en la obligación de llevar adelante, a partir del próximo 29 de junio de 2012, un plan de lucha que consistirá en realizar asambleas en los lugares de trabajo y paros sorpresivos que afectarán los servicios de las empresas", dice el documento de la AAA.

Desde el gremio explicaron que la conducción de Aerolíneas Argentinas y Austral, en manos del camporista Mariano Recalde, cometió "sanciones arbitrarias al personal, trato discriminatorio y violaciones convencionales". En rigor, el sindicato ya había presentado una denuncia formal ante el ministro de Trabajo, Carlos Tomada.

En esa presentación, realizada el 1 de marzo, el sindicato señaló que la empresa decidió unilateralmente equiparar "los criterios de programación entre los TCP´s [tripulantes de la cabina de pasajeros] y las Tripulaciones Técnicas en el área de cabotaje y regional, a los efectos de dar uniformidad y lograr una operación más eficiente; siguiendo para ello, expresas instrucciones impartidas por la Presidenta de la Nación".

Pero según Frecia, esos cambios unilaterales "constituyen, sin eufemismos, una flagrante violación al orden público laboral expresado a través de la desarticulación de dos convenciones colectivas de trabajo, la 43/91 E y la 51/91 E, pactadas libremente entre la organización sindical y las empresas Aerolíneas Argentinas y Austral Líneas Aéreas; y por ende expresan una alteración ilícita de los contratos individuales de trabajo de los tripulantes de cabina de pasajeros".

El gremio rechazaró además que "el lugar que asume la conducción" que encabeza Recalde porque intenta justificar los cambios "colocándose en interprete de una demanda de dudosa procedencia" y se ubica "peligrosamente en un rol que no es propio, el de representar los derechos e intereses del colectivo laboral que como organización sindical, a nosotros nos corresponde".

Además, consideraron preocupante que la decisión se haya tomado por "expresas instrucciones impartidas por la Presidenta", pues se trata de un empresas aerocomerciales que, más allá de la clara incidencia del parte del Estado, aún se rigen por la Ley 14.250, por sus convenios colectivos aplicables y por la ley de contrato de trabajo. "Por tanto, mal puede atribuírsele una ingerencia tal al Estado en franca violación de las autonomías colectivas", señalaron en la denuncia.

"Habiendo agotado todas las vías de reclamo, tras un tiempo más que razonable de paciente espera, y ante la falta de respuesta por parte de las autoridades responsables, nos vemos obligados a llevar adelante estas medidas", explicaron desde AAA.