Alberto Rodríguez Saá evitó confirmar que ya cerró un acuerdo de apoyo mutuo con Francisco De Narváez, pero lo dio por hecho al afirmar que se está avanzando y será “muy difícil” romper filas.
“Hemos avanzado muchísimo en un acuerdo para que sea candidato a gobernador. Y en los programas. Estamos haciendo una especie de consulta en los pueblos a ver que opinan”, afirmó el gobernador puntano, durante una rueda de prensa que brindó tras un almuerzo que compartió en el Club Americano de Capital Federal, acompañado del candidato a diputado nacional Carlos Saad.
-¿Por como vienen parece difícil dar marcha atrás? –consultó LPO
-Y sí es difícil dar marcha atrás. Pero no es blanco o negro, hay muchos grises –respondió.
Rodríguez Saá admitió también que le conviene acordar con el candidato a gobernador y atacó a Ricardo Alfonsín por ignorar en sus últimas apariciones a quien será su aliado en la boleta de la provincia de Buenos Aires.
“Si yo fuera Alfonsín podría en mi spot publiciatario gobernador y evitaría que (De Narváez) vaya a hablar con otro”, sostuvo el candidato de Compromiso Federal, quien dijo estar convencido de que está segundo en las encuestas, aunque aún sin chances de alcanzar a un ballotage.
Por eso en la exposición que brindó para los socios del club le apuntó “al clima político” que señala la elección como ya definida. “En todo el mundo hay movimiento de los indignados; aquí, hay de los resignados”, comparó Rodríguez Saá ante los comensales.
Recordó, además, que en las primarias no votaron un millón de personas y que tuvo muchos problemas para que se encuentren sus boletas en los lugares donde no pudo llevar fiscales.
No omitió de la crítica a su competidor Hermes Binner, al remarca que también Rosario tiene villas miserias. “A mi me parece una experiencia maravillosa el socialismo en santa Fe. Pero no me gusta un socialismo con villas miserias. Y en Santa Fe aumentaron las villas miserias”, afirmó.
Desde el atril, el puntano retomó las comparaciones entre la administración de San Luis y el país. “Argentina está sembrada de villas miseria. Nosotros tenemos el 1% del presupuesto y 60 mil viviendas sociales; por lo que el país debería tener 6 millones y no habría problemas”, calculó.
Su propuesta se basó en una agenda social –con la vivienda y la salud como ejes- y en una agenda digital, al atender que la inclusión digital se convirtió en un nuevo derecho humano y promocionar una vez más el sistema de wi fi gratis que implementó en San Luis.
“Argentina no tiene sueños ni planes. En un mundo globalizado no vamos a obtener ventajas comparativas si sólo hablamos del valor de la moneda”, enfatizó el puntano.
Se diferenció de Alfonsín respecto a los subsidios. “No hay que sacar algunos y otros no. Tienen que volver todos y después tenemos que engrosar el salario para afrontar los valores reales”, propuso.
Apeló a la ironía para responder a las acusaciones de Duhalde sobre un supuesto acuerdo con el gobierno para eliminar los juicios que tiene San Luis. “Es como Alicia en el país de las maravillas, diciendo lo que va a pasar la semana que viene”, se burló Rodríguez Saá.
