La Justicia Electoral rechazó la candidatura de Adolfo Rodríguez Saá en la provincia de Buenos Aires, por lo que finalmente no podrá disputar la gobernación. No se trata de un dato menor, a un día del encuentro -con una foto pública, incluso- entre Francisco De Narváez y el gobernador puntano, también postulante a la presidencia.

El fallo rechaza la postulación del ex gobernador de San Luís con el argumento de que no participó de las primarias. Lo contradictorio es que no pudo hacerlo casualmente por una impuganción judicial. Es lógco, entonces, que en el entorno de los Rodríguez Saá digan que el fallo es una "burla", pues no resuelve la cuestión de fondo.

"Se aprovecharon de la impugnación que había hecho Duhalde y que no se había resuelto de manera definitiva antes de las primarias. Es decir, no resuelven el verdadero problema que acá se discute. No se hacen cargo", explicó enojado a LPO un asesor de los hermanos puntanos.

Pero mientras se quejan frente a los medios de comunicación y denuncian una "proscripción", lo cierto es que Alberto y Adolfo ya analizan cómo continuarán en la provincia más importante del país en términos electorales. Por eso, ambos pidieron una reunión urgente con los máximos referentes de su partido para definir en las próximas horas cuál será la estrategia.

Es que este fallo prácticamente obliga a una definición. Si bien el "Colorado" y "El Alberto" no podrán compartir una boleta -la ley electoral no permite cambios después del vencimiento de los plazos-, sus equipos trabajan en un acuerdo político en el que los dos ganarían algo.

Los Rodríguez Saá manejan dos posibibles escenarios. El primero es que Nicolás Tagliafico -que ocupaba el lugar de vice en la fórmula con Adolfo- sea el nuevo postulante a la gobernación bonaerense. Pero desde el entorno saben que no es un candidato fuerte, sino que incluso podría traccionar negativamente la performance de Alberto en esa provincia.

La opción más fuerte es la de concretar una alianza política con Francisco De Narváez. Así, no sólo podrían sumar algunos votos mostrándose con él, sino que además -se esperanzan- ganarían mucho respecto a la fiscalización de sus votos. "Podríamos defender nuestros porotos, cosa que solos no podemos hacer. Y menos en la provincia de Duhalde", explican.

Desde el bunker del "Colorado", esperan la resolución de esa cumbre en San Luís, y se esperanzan con alguna declaración pública de Alberto. "Debería pedir abiertamente que sus votantes apoyen a De Narváez o bien podría hacerlo de una forma más sútil. Tampoco se descarta que haya nuevos encuentros en territorio bonaerense, como el otro día. Pero en este momento, la pelota está de su lado", dicen en Las Cañitas.

Desde ambos sectores saben que Ricardo Alfonsín dejó de ser un problema. Además de provincializar la campaña, De Narváez está convencido que el candidato radical no podrá cruzarlo públicamente porque la lista que encabeza está repleta de dirigentes radicales.

"Jugar en contra de De Narváez sería jugar en contra de muchos radicales. De los 135 candidatos a intendentes, cerca de 104 son de la UCR. Todo lo que sume Francisco, lo van a sumar ellos. Así que no los perjudica, sino que incluso los puede beneficiar", justican los denarvaístas.