Mientras Gabriela Michetti no logra conformar un armado de sustentación para su candidatura en 2011 y Horacio Rodríguez Larreta no puede subir en las encuestas, Francisco de Narvaéz empezó a considerar estar en la nómina de candidatos a jefe de gobierno porteño.

Cerca del “colorado” creen que, dado que la ciudad de Buenos Aires es lejos el distrito más antikirchnerista del país, la posibilidad podría ser cierta si es que finalmente llegan a un acuerdo con Mauricio Macri. Y quien mejor que el hombre que derrotó a Néstor Kirchner, opinan.

“Es un excelente candidato, es un Mauricio potenciado”, comenta un alto dirigente que trabaja codo a codo con él y que vería con muy buenos ojos su desembarco porteño. “En Capital puede estar muy bien”, completa.

Por ello, con reserva el ex dueño de Casa Tía encargó sondeos cuantitativos y cualitativos sobre su imagen con un anclaje no sólo nacional y provincial, sino porteño.

En este marco, De Narváez está lejos de convencerse de ir por la provincia de Buenos Aires en dos años. Las dudas las sembró el propio gobernador Daniel Scioli en un encuentro privado que mantuvo con el “colorado” y Felipe Solá hace algunos meses.

Allí el gobernador les sinceró los números de su administración y los problemas estructurales que cualquier otro dirigente que llegue a ese cargo iba a tener.

Al salir del encuentro, De Narvaéz, espantado por la situación de la provincia (peor aún de la que él mismo esperaba) y las pocas posibilidades de maniobra, le comentó a uno de los diputados que siempre lo acompaña: “Yo no puedo venir acá”.

El análisis, y la especulación, es que si “el colorado” va como jefe de gobierno no sólo le abriría las puertas a Macri como candidato a presidente, sino que en el caso de ganar él, inclusive podría ser el candidato a vice del actual jefe comunal, en un acuerdo que tire por la borda la rispidez permanentes que existe entre ellos.

Presidenciable, complicado

Si bien todavía no hay nada concreto, De Narváez sigue explorando futuros. Si bien ya trascendió la idea que también sea candidato a presidente, como se sabe su condición de colombiano le impediría serlo y por ello ya piensa en la Corte Suprema en caso de tomar esta decisión.

En rigor, para llegar al máximo Tribunal él debería presentarse y su candidatura debería ser impugnada por su condición de extranjero. En ese marco, el diputado electo cree que tiene asegurados dos ministros de la Corte, y tiene chances de sumar un tercero. Sin embargo es difícil preveer un fallo de esta envergadura por más promesas que se suelten. Y eso De Narváez lo sabe.

Por su lado Macri sigue muy feliz por los resultados de las encuestas. Su imagen sigue siendo alta, más del 40%, y está arriba junto a Julio Cobos en camino a las presidenciales. Pero eso será otra historia distinta.