El vicegobernador de Chaco, Juan Carlos Bacileff Ivanoff, pidió la intervención de la Justicia para que investigue el día de furia que protagonizó la esposa del gobernador, Jorge Capitanich, Sandra Mendoza, quien la semana chocó cinco autos oficiales y tiró abajo una pared.
Según el portal Chaco On Line, Bacileff Ivanoff argumentó que sólo había actuaciones administrativas, pero remarcó que “los responsables del área no comunicaron a la Justicia aunque cuando hay daños patrimoniales hay que deslindar responsabilidades”.
Por otra parte, Bacileff Ivanoff apuntó que se tiene que determinar quién dio la orden de trasladar los autos dañados a un taller privado, y agregó: "Ordené que los vehículos vuelvan, y que se determine quién ordenó trasladarlos. Un jefe de guardia nos informó que los autos habían sido llevados. No se va a encubrir a nadie".
Además, el vicegobernador, quien señaló que no estaba cuando se produjo el incidente y que se enteró por la prensa de los sucedido, aseguró: "No queremos que se encubra nada ni a nadie, por eso pedimos la investigación. Ahora, la Justicia se tiene que encargar, y desde el gobierno debemos facilitar al esclarecimiento".
“Nadie acusa a nadie, sólo los medios nacionales sacaron dos hipótesis de los hechos, cualquiera de las dos hipótesis puede generar responsabilidades así que tiene que intervenir un poder independiente para garantizar transparencia”, aseveró el vicegobernador chaqueño, según los medios locales.
De acuerdo a los pocos detalles que ofreció el vicegobernador hay más de 5 vehículos siniestrados y hay daños en la mampostería de los garajes de la Casa de Gobierno. De todos modos Bacileff Ivanoff se escudó en el secreto de sumario para no precisar dónde se encuentran los vehículos siniestrados que fueron retirados del playón.
En tanto, el vicegobernador pidió la intervención del Asesor General de Gobierno para los sumarios administrativos, argumentando que “alguien es responsable que no se haya comunicado directamente a la Justicia”.
Pico de stress
Mientras la Justicia investiga, Sandra Mendoza salió a decir que es víctima de una operación política por la que responsabilizó a la Alianza de Angel Rozas.
“Mi adicción al trabajo hizo que me provocara esto”, dijo la esposa del gobernador Jorge Capitanich en declaraciones a Radio Génesis, relacionando lo ocurrido con la diabetes que padece.
“Por trabajar no estoy cumpliendo lo de comer las cuatro comidas, y me bajó el azúcar. Cuando agarré la camioneta me empecé a sentir mal, perdí el conocimiento y no me acuerdo de nada”, dijo y desmintió que haya tenid una discusión con su marido. La versión que circuló fue que Capitanich le había pedido a su esposa la renuncia al cargo ministerial y que a cambio le ofreció una diputación nacional, provocando la reacción conocida.
Mendoza, en cambio, dijo que no hubo diferencia alguna con el gobernador y que todo se redujo a un episodio clínico, como planteara el gobierno el viernes en un comunicado.
“Esto es una operación de prensa de la Alianza”, acusó Mendoza, que mencionó puntualmente entre los promotores del supuesto plan al ex gobernador Angel Rozas. Y cuando se le señaló que hay quienes dudan de su estabilidad emocional, contestó: “¿Quién está sano? Puede ser que tenga algún problema, pero voy al consultorio. El que se cree sano no está sano. Pero a mí nunca me van a poder decir que soy una corrupta. Cuando uno trabaja mucho dicen que es una loca”.