La aspiración de la secretaria Rosa Icela Rodríguez quedó perfectamente instalada entre la clase política de la Ciudad de México que se organiza en torno a la candidatura presidencial de Claudia Sheinbaum. Su aparición junto a la Jefa de Gobierno en el templete del Auditorio Nacional, fuera de otro contexto que no sea una sucesión adelantada chilanga, ha generado distintas reacciones; todas, en beneficio de la Secretaria de Seguridad. 

Pues si Rosa Icela Rodríguez fue secretaria de Gobierno de Sheinbaum Pardo (y una persona muy cercana a la mandataria, casi al mismo grado de Clara Brugada), ahora no trabaja en el Gobierno de la Ciudad de México, y gran parte de su labor en la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana lo realiza en estados alejados del centro del país. Sin embargo, protagonizó el Cuarto Informe de Gobierno junto a la Jefa de Gobierno.

Según pudo conocer LPO en Palacio Nacional, el presidente López Obrador ya habría dado la indicación a todas las corcholatas presidenciales que la Ciudad de México como el Estado de México no entrarán en la negociación de la sucesión del Ejecutivo Federal y, por el contrario, sus candidatas no responderán a nadie que no sea AMLO (incluso antes que a Morena). De ahí la elección de dos figuras tan leales para cada estado: Rodríguez Velázquez y Delfina Gómez.

Ebrard fue al acto de unidad, pero le mandó un mensaje a AMLO: "Tiene que haber piso parejo"

Esto, desde luego, hizo que el equipo del canciller Marcelo Ebrard -e incluso algunos senadores de Morena- reconozcan que el presidente López Obrador no habla en serio cuando asegura que al terminar su mandato constitucional se irá a su rancho a Palenque, Chiapas, y renunciará a la política. Todo lo contrario, su actividad y operación podrían centrarse en ciertas tribus y perfiles que le han mostrado lealtad incondicional; en particular, en gobiernos estatales que le deben su postulación (y algunos incluso su triunfo).  

De ahí también que no sólo desplazara a Sheinbaum y Ebrard de la sucesión, sino que instale al secretario Adán Augusto López -su soldado tabasqueño más eficiente y leal- en el control y negociación entre las tribus de la 4T. Baste recordar, como lo reveló LPO, que el funcionario federal fue quien confirmó a la plana mayor de Morena que Mario Delgado y Citlalli Hernández se quedarían en la dirigencia del partido hasta 2024.

El senador Higinio Martínez dio su visto bueno a la candidata de Palacio, su histórica aliada Delfina Gómez, a cambio de mantener el control del partido en el Estado de México a través de la senadora Martha Guerrero. Al mismo tiempo, el presidente López Obrador minimizó -por ahora- las chances de la postulación del ebrardismo de la subsecretaria Martha Delgado al Gobierno de la Ciudad de México.

Aquel "no" de López Obrador fue explícito ante la solicitud de la senadora Malú Mícher, quien en junio a nombre del titular de la Cancillería exhortó a la élite de la 4T a incluir a la Ciudad de México en el acuerdo de 2024. AMLO buscará otra forma de tener el poder, detrás del poder.