Se cuenta que Claudia Sheinbaum logró movilizar alrededor de 65 mil personas en Chiapas en los tres mítines que ofreció este sábado, logrando una de las convocatorias más grandes hasta ahora durante su gira.

A pesar del éxito, su visita por la entidad, una de las más empobrecidas y en medio de problemas de inseguridad, la candidata no estuvo exenta de recibir demandas y cuestionamientos, enfocados principalmente a la alianza de Morena con el Partido Verde, partido que gobernó la entidad con Manuel Velasco.

"¡Claudia, el Verde no es aliado, es plaga disfrazado", decían algunas mantas en el recorrido que hizo Sheinbaum de Tila a las Margaritas, en donde la gente buscaba un acercamiento con la candidata, lo que provocó retrasos en sus presentaciones. "Limber y PVEM corruptos", se veía también en algunas cartulinas.

Sheinbaum vuelve a hacer campaña en CDMX y prepara un acto en Tlalpan

El exgobernador chiapaneco actualmente es coordinador de alianzas en la campaña de Sheinbaum. Fue uno de los primeros en aceptar levantar la mano de la ex jefa de gobierno capitalino en el proceso de elegir la candidatura presidencial para Morena.

Sin embargo, los escándalos lo han perseguido y es señalado de actos de corrupción por desfalcos millonarios durante su periodo como gobernador a través de empresas fantasmas y compra de votos.

El malestar entre un sector de la ciudadanía se ha mostrado en el cuestionamiento a Morena por este tipo de alianzas, tal como se observó en Chiapas.

La candidata, por su parte, defendió la alianza. "Somos hermanos, ya sé que a veces entre hermanos y hermanas tenemos nuestros pleitos, pero aquí somos hermanos; la disputa no es entre Morena, la disputa es para que no regrese la corrupción y los privilegios", clamó.

En su discurso también advirtió: "Si queremos que siga la transformación, que sigan los programas sociales, entonces hay que votar seis veces por los partidos de nuestro movimiento". Y agregó: "La lucha no es contra nosotros, la lucha es contra la pobreza".