En línea con las estimaciones del mercado, la Reserva Federal (Fed, por sus siglas en inglés) moderó el ritmo en el alza a tasas de interés, pues este miércoles anunció un incremento de solo medio punto, pero también manda señales de que continuará la estrategia en 2023.

El banco central estadounidense anunció esta tarde que la tasa referencial se ubica ya en un rango entre 4.25 y 4.5%, luego de este incremento de 50 puntos base, que contrasta con las cuatro alzas consecutivas en 0.75 puntos realizadas anteriormente.

Este relajamiento en la política monetaria ocurre en un escenario de menor inflación en ese país. En noviembre, cuando la inflación se ubicó en 7.3%, el país sumó cinco meses con un registro inflacionario a la baja, sin embargo, el titular de la Fed, Jerome Powell, afirmó que aún es necesario seguir observando los efectos de la política monetaria en la inflación general. Lo cierto es que una buena noticia es que el componente subyacente acumuló dos meses a la baja.

Sigue a la baja la inflación en EU y le da un respiro al peso, que se aprecia a los $19.64 por dólar

Este anuncio también refuerza la expectativa de que el día de mañana, jueves, en México la junta de gobierno que encabeza Victoria Rodríguez replicará la medida, con lo que cerraría el año con una tasa de interés de 10.5%, la tasa más alta en los últimos tiempos. 

A pesar de ese mejor escenario, las proyecciones de los funcionarios dentro del banco central estadounidense apuntan a que el alza a tasas seguirá en 2023 aunque acaso dispersando los temores de que será con una tendencia más agresiva, pues prevén que ronde el 5% el próximo año.

En esta última revisión de año también confirman un escenario más adverso para el año próximo, pues recortó la expectativa a 0.5, desde un crecimiento proyectado en septiembre de 1.5%, lo que aumenta la posibilidad de una recesión.