El "Pacto de Estado" entre el Psoe y el PP, carta que el bipartidismo apostó para afrontar la crisis de la guerra, derrapó antes de despegar. Días atrás, LPO adelantó que, tras el portazo en la cara del presidente Sánchez a Alberto Núñez Feijóo (no aceptó ninguna de sus propuestas económicas durante la reunión que mantuvieron en el Palacio de la Moncloa), los populares cambiaron rápido de estrategia: crispar al máximo la retórica contra el Ejecutivo y habilitar el diálogo institucional con Vox, el único socio disponible para pactos de gobernabilidad.

La respuesta de Sánchez a la "radicalización" de su principal adversario político no se hizo esperar. Adoptó una estrategia similar: apuntar a uno de los talones de Aquiles de Génova (la corrupción) y dinamitar -definitivamente- su acercamiento a Feijóo.

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El líder socialista se aferró en las últimas horas al nuevo escándalo que sacude al PP de Madrid por los contratos de compra de mascarillas durante la pandemia para vincular a los populares con la corrupción.

"Yo, a la dirección nacional del PP aún no le he escuchado decir absolutamente nada de lo que estamos viendo en Madrid, ni de Ayuso, ni de Almeida", disparó en una entrevista con Antena 3.

Sánchez este lunes por la mañana en una reunión de la Ejecutiva Federal del PSOE.

Europa Press

El jefe del Ejecutivo explicó que, a su juicio, el "primer problema" que tiene el PP se "llama corrupción" al referirse a la investigación que están llevando a cabo los tribunales sobre algunos contratos de compra de material sanitario del Ayuntamiento y de la Comunidad de Madrid.

En las elecciones generales habrá dos opciones: una que gobierne el Psoe con Podemos o la plataforma de Yolanda Díaz y otra, el PP con la ultraderecha

Sánchez cuestionó al alcalde José Luis Martínez-Almeida por decir que el abogado que presentó la querella contra él está vinculado al Psoe. "No es de recibo", dijo. Y aseguró que este caso le recuerda a cuando estalló el caso Gürtell y el PP decía que era una trama contra el PP. "Luego la Justicia ha dicho que era una trama del PP", recordó.

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A su entender, el PP tiene que "recordar" que la corrupción los"desalojó" de la Moncloa. Acusó a Génova de no dar el ejemplo con sus "silencios" y sus "miradas a otro lado" en la trama de contratos del material sanitario de Madrid.

"El impuesto más caro que pagan los ciudadanos es el de la corrupción", dijo en respuesta al pedido de Feijóo de una rebaja generalizada de cargas fiscales para paliar la crisis económica.

Sánchez descartó de plano rebajar el IRPF a las rentas bajas y medias, tal como le pidió el líder del PP, y denunció que quienes piden esta medida están "anunciando recortes como los que hicieron durante la crisis financiera".

En este sentido, recordó que el penúltimo plan fiscal lo firmó un señor --en referencia a Rodrigo Rato-- que ahora está condenado y el último, Cristóbal Montoro, quien hizo una "amnistía fiscal para que pudieran eludir el pago de impuestos muchos implicados en asuntos de corrupción".

El presidente le exigió al PP "resolver su problema con la ultraderecha" y calificó a Vox de la "versión ibérica" de los partidos ultras de Alemania o Francia. Y advirtió que el acuerdo en Castilla y León se va a replicar en Andalucía e "incluso" en el Gobierno de la nación.

"El PP está blanqueando a la ultraderecha"

En su opinión, la fragmentación parlamentaria "es muy elevada", lo que evidencia que cuando se convoquen elecciones se va a ir a fórmulas de gobiernos de coalición como el actual. "Habrá dos opciones: una que gobierne el Psoe con Podemos o la plataforma de Yolanda Díaz y otra, el PP con la ultraderecha", concluyó.