La borrasca que este jueves azotó gran parte de la península, con vientos fortísimos, transformó un pequeño incendio forestal en la localidad valenciana de Montitxelvo (600 habitantes) en incontrolables llamas que obligaron a desalojar varios municipios y urbanizaciones.
Un incendio forestal a principios de noviembre desnuda la vulnerabilidad de esta comunidad -y de tantas otras en España- a un fuego sin control que, producto del cambio climático, causará cada vez más estragos, a juicio de expertos y científicos.
Sin embargo, el Gobierno bipartido del PP y Vox concretó la semana pasada un tijeretazo presupuestario a las partidas destinadas a la prevención de estos fenómenos. Los recursos pasarán de los 40,3 millones del presente ejercicio a los 36,6 millones, un 9,2% menos.
El recorte no es puntual y asilado. Forma parte de la hoja de ruta "negacionista" del Ejecutivo autonómico en materia medioambiental. Las partidas climáticas son las más afectadas por los recortes en los primeros presupuestos del gobierno de Carlos Mazón.
Los fondos destinados a la emergencia climática y la transición ecológica pasarán de los 237 millones de euros previstos por el anterior Gobierno a 148 millones, el mayor recorte de todo el ejercicio.
La diputada Paula Espinosa (Compromís) fue testigo de los argumentos que esgrimieron el PP y Vox para justificar unos drásticos recortes que coinciden con un planeta en ebullición y con un calentamiento global récord que se está manifestando con desastres naturales cada vez más frecuentes y devastadores.
"La emergencia climática no existe", escupieron los diputados de Vox, quienes trataron a los partidos defensores de aumentar los presupuestos de esta emergencia "de inquisidores climáticos".
"Es desolador que con una emergencia climática tan evidente el PP y Vox apliquen políticas negacionistas", lamenta Espinosa en diálogo con LPO. "Tenemos un incendio forestal avivado por la borrasca y al mismo tiempo el despido de 300 agentes forestales y el recorte de las partidas para prevención de incendios. Esto está pasando en Valencia", agrega.
La diputada denuncia una "política general de Estado" en materia de recorte a las partidas climáticas. Pone otro ejemplo: el tijeretazo a los fondos europeos destinados a la transición ecológica, con una poda de más del 90%.
"En la sesión parlamentaria los diputados de Vox hablaron de "religión climática" y pusieron en duda la existencia del cambio climático para justificar estos recortes. Usaron toda la retórica negacionista. Muchísimas barbaridades. Lo más fuerte lo dijo Vox, pero el PP avaló cada comentario diciendo, por ejemplo, que ninguno de nosotros podía asegurar la aceleración del cambio climático", explica la legisladora.
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Y agrega: "Da miedo saber en qué manos estamos. Vox lo grita, pero el PP hace seguidismo. Mi compañero Juan Bordera se los dijo con claridad, a ver quién os va a salvar cuando por este negacionismo os estéis ahogando en la piscina. Niegan el cambio climático y, encima, se burlan de quienes advertimos sobre esta urgente advertencia".
Espinosa ve "terrible" este escenario en un momento en que toda política pública tendría que ser climática y ecológica. "Con dificultades hemos avanzado mucho en materia medioambiental en la pasada legislatura, hemos puesto a Valencia como una de las principales ciudades verdes de Europa. Y ahora un gobierno tira todo por la borda. Lo peor es que, por la magnitud y aceleración de la emergencia, no podamos revertir cuatro años de negacionismo, el daño de la inacción puede ser irreversible", concluye.
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