La campaña de Joe Biden y Kamala Harris encontró un motivo para ilusionarse en el territorio hostil de Florida. La Corte Suprema floridana, de mayorÃa conservadora, le abrió una paradójica luz de esperanza a los demócratas. En un estado que se volvió demasiado adverso para el partido azul, al punto de que el último candidato presidencial demócrata en imponerse ahà fue Barack Obama, la Corte dio dos definiciones clave. Selló la virtual prohibición del derecho al aborto, pero a la vez habilitó un plebiscito que podrÃa revitalizar y ampliar la base electoral de Biden-Harris en noviembre.
"Florida no es un estado fácil de ganar, pero sà es posible para el presidente Biden, especialmente dada la débil campaña que está llevando a cabo Donald Trump, con problemas de liquidez, y las graves vulnerabilidades dentro de su coalición", afirmó la jefa de campaña del oficialismo Julie Chávez RodrÃguez. Lo dijo en una ronda de prensa ante LPO y otros medios. La semana pasada, la campaña de Biden presentó su equipo especializado para intentar derrotar a Trump, quien a su vez vive en Palm Beach. El team está liderado por los experimentados floridanos Jasmine Burney Clark, Phillip Jerez y Jackie Lee.
Los estrategas demócratas buscarán poner a Trump a la defensiva en el estado al que algunos llaman el Ground Zero de las polÃticas MAGA. "Empezando por su cruel y peligrosa prohibición del aborto y ataques a las personas mayores hasta los crecientes costos causados por las polÃticas republicanas, la plataforma de Trump es profundamente impopular entre los votantes que decidirán estas elecciones en el Estado del Sol, y nuestra campaña está preparada y lista para aprovechar esta oportunidad", se ilusionó la latina Chávez RodrÃguez.
En la presidencial de 2020, Trump se impuso por más de 3 puntos contra Biden en Florida. Aun perdiendo a nivel nacional, el republicano ganó en su estado adoptivo. Desde ese momento, las encuestas no dieron señales de cambios en la tendencia favorable a Trump. Al contrario, algunas muestran que el ex presidente potenció su dominio. Pero Chávez RodrÃguez no se resigna y asegura que Florida es "ganable".
Con ese objetivo, la campaña demócrata acaba de presentar a Latinos con Biden-Harris, un programa de organización con raÃces entre la comunidad cubana, portorriqueña y venezolana de Florida. En ese punto, las fallidas negociaciones entre la Casa Blanca y Nicolás Maduro podrÃan jugar en contra de Biden entre los votantes de origen venezolano. Pero la campaña demócrata ahora busca hacer foco en los derechos reproductivos.
El gobernador demócrata de Carolina del Norte, Roy Cooper, culpó a Trump por revertir el histórico fallo Roe v. Wade, un hecho del que el expresidente se jacta hasta hoy. "Fue él quien permitió a los extremistas republicanos aprobar prohibiciones draconianas, como la que acaba de ser confirmada en Florida, que están perjudicando a las mujeres y amenazando a los médicos", se quejó Cooper, a su vez miembro de la Junta Asesora Biden-Harris 2024.
El mandatario de Carolina del Norte adelantó que, ante la inminente prohibición del aborto en Florida, miles de mujeres viajarán a su estado para acceder a una interrupción legal del embarazo.
¿Qué fue lo que resolvió la Corte floridana? En el estado gobernado por el republicano Ron DeSantis, los jueces consideraron constitucional la prohibición del aborto tras las 15 semanas, promulgada por ley en 2022. La votación fue ajustada: 4 contra 3. El fallo a su vez aumentará la restricción. La prohibición a partir de las seis semanas de embarazo, aprobada el año pasado tras la primera legislación, entrará en vigor en un plazo de 30 dÃas. En los hechos, el aborto quedará inhabilitado en Florida.
AsÃ, la Corte facilitó la rápida transformación del Estado del Sol, que solÃa ser un destino para las mujeres que buscaban realizarse abortos en la zona sur de los Estados Unidos. Los supremos, sin embargo, autorizaron la realización de un plebiscito que era impulsado por los opositores a DeSantis. La inclusión de la pregunta sobre el aborto en las urnas les otorgó a los demócratas la oportunidad de continuar con su campaña nacional por la libertad reproductiva. Los votantes de Florida podrán pronunciarse directamente sobre el tema el mismo dÃa de la elección presidencial. Los antecedentes recientes favorecen a la Casa Blanca: campañas a favor del aborto ya probaron su éxito en siete estados, Kansas, Ohio y MÃchigan, entre otros.
AsÃ, los demócratas apuestan a centrar la campaña en ese debate, la primera gran razón de la esperanza de Biden y sus colaboradores. La estrategia apunta a eludir agendas más incómodas, como la de la crisis migratoria. Una encuesta de la Universidad del Norte de Florida reveló que el 62% de los ciudadanos votarÃan por permitir el aborto. Para ser aprobada en el plebiscito, la interrupción del embarazo necesita una aprobación superior al 60%. Según otro informe de la Florida International University, una mayorÃa de los votantes de origen latino rechaza la prohibición del aborto tras la sexta semana de embarazo. Un 42% está directamente en desacuerdo con esa restricción, mientras que un 22 no tiene posición tomada.
Existe una segunda razón para creer en el operativo rescate de Florida. Es un dato alentador para Biden, escondido en el operativo que logró el plebiscito. La petición para que se incluya la consulta en la boleta electoral de noviembre fue apoyada más de un millón de personas. Dentro de ese universo, firmaron más de 150.000 votantes registrados como republicanos.
Por debajo de la carrera presidencial, los candidatos a cargos legislativos de Florida también pretenden aprovechar la bandera del aborto para combatir a los republicanos del estado. Postulante a congresista de Florida, la demócrata Lucia Baez-Geller le apuntó directamente a la "anti-derechos" MarÃa Elvira Salazar. La republicana Salazar irá por la reelección en la Cámara de Representantes. De origen cubano-americano, votó recientemente a favor de restringir el acceso al medicamento abortivo Mifepristona.
"Ella se opone a la libertad de elegir de las mujeres. Intentó frenar el plebiscito. Pero las mujeres de Florida no vamos a ser silenciadas y en noviembre vamos a demostrar que no pueden silenciarnos en nuestros derechos fundamentales", argumentó la hispana Báez-Geller ante este medio.
La presidenta del Partido Demócrata de Florida, Nikki Fried, agregó que el Estado del Sol "liderará la lucha para defender los derechos reproductivos y proteger la democracia. Somos la última lÃnea de defensa, no sólo para la gente de nuestro estado sino para todo el paÃs". Algunos demócratas de Florida, en cambio, no se muestran tan optimistas.
El dirigente Thomas Kennedy, vocero de la organización Immigration Hub, no cree que su partido tenga chances reales de arrebatarle la elección a Trump. Nacido en la Argentina, Kennedy renunció a su silla en la Junta Directiva del Partido Demócrata por Florida. Lo hizo en rechazo a algunas polÃticas del gobierno de Biden, como la alianza con Israel en la guerra de Medio Oriente. "Florida no está en el tablero. Tampoco estaba en el 2020, y Biden ganó sin la necesidad de pelear acá", se lamenta Kennedy ante LPO. "Simplemente van a aparentar que invierten y hacen un esfuerzo, pero sólo como una táctica para obligar a la campaña de Trump a que gaste dinero en el estado", opina este demócrata escéptico sobre la suerte de Florida en las presidenciales.
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