La gobernadora de origen hispano que busca la reelección de Nuevo México, Michelle Luján Grisham, lleva una clara ventaja a su rival republicano, el meteorólogo Mark Ronchetti, al encausar la elección del 8 de noviembre al tema del aborto.

Tal vez en ningún estado como en Nuevo México ha sido más claro que la decisión de la Suprema Corte al terminar el derecho al aborto, que inicialmente pareció un triunfo republicano conservador, se tornó contraproducente para sus candidatos.

Mientras en muchas elecciones en el país los republicanos tratan de llevar la contienda electoral hacia los temas de la inflación y una potencial recesión, el republicano Ronchetti se encuentra en Nuevo México empantanado en el tema del aborto. La inflación estatal es del 8.2 por ciento, la más alta en 40 años, y Ronchetti no la ha abordado.

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"Quiero dejar en claro lo que está en juego en esta elección: la igualdad y el derecho de las mujeres a tomar decisiones profundamente personales sobre el cuidado de la salud", dijo Luján Grisham en debate este fin de semana, "eso es lo que está en la boleta electoral en Nuevo México".

Ronchetti respondió con un reproche, de que la gobernadora planea construir una nueva clínica que entre otros servicios ofrecerá el aborto y lo podría brindar también a mujeres del vecino estado de Texas que busquen esa atención prohibida y penalizada en su estado.

Michelle Lynn Lujan Grisham nació en Los Alamos, Nuevo México, donde sus raíces familiares se remontan a doce generaciones. De hecho, Lujan Grisham sus parientes actúan en política desde hace más de tres décadas y tienen una presencia fuerte en el distrito. La fama era tal que en las calles de Nuevo México solía hablarse de tres partidos políticos: los Demócratas, los Republicanos y los Luján. Su abuelo Eugene Luján fue el primer presidente hispano de la Corte Suprema de Nuevo México y su primo Manuel Luján fue secretario de Interior del presidente George H.W. Bush.

Michelle Lujan Grisham nació en Los Alamos y sus raíces familiares en Nuevo México se remontan a doce generaciones. De hecho, Lujan Grisham sus parientes actúan en política desde hace más de tres décadas y tienen una presencia fuerte en el distrito.

La confrontación se extiende a todos los planos. Michelle Luján incluye en su plataforma también planes para impulsar la economía, la educación, programas sociales y mejorar la tecnología para vigilar la frontera.

Ronchetti quiere desplegar en la frontera de Nuevo México con México a la Guardia Nacional en contra de los indocumentados, para completar los despliegues de los vecinos estados de Texas y Arizona, desmantelar cualquier ley que proteja o beneficie a los migrantes y planea oponerse a todo intento de aumento de impuestos. Pero el tema del aborto se menciona todos los días vinculado al proceso electoral.

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Luján sostiene que "el estado no tiene por qué intervenir en las decisiones que haga una mujer con relación a su salud y la estabilidad de su familia; si, por ejemplo, un médico y una segunda opinión médica advirtieran a una mujer sobre serios riesgos si tiene un parto", el gobierno no tiene por qué obligar ese parto, dijo la gobernadora.

Ronchetti acusa a Lujan de "ir al extremo innecesariamente, porque quiere autorizar el aborto hasta el último momento" de la gestación, previo al parto, "y para mí eso es ir al extremo".

El meteorólogo de noticieros televisivos cede y dice que, si resulta elegido gobernador, a diferencia de las administraciones de Texas y Arizona, autorizaría el aborto en las primeras 15 semanas de gestación. Pero aún con esa concesión, el aspirante republicano se encuentra en medio de una polémica porque antes había dicho que se oponía completamente al aborto, una posición más de acuerdo con la mayoría de los candidatos republicanos.

Un pastor popular en Nuevo México, Steve Smothermon, de la iglesia Legacy, aseguró en un sermón Ronchetti le dijo que se opondría completamente al aborto, si ganaba la elección. "Me dijo ‘escucha, solo quiero empezar por deshacerme del aborto tardío -después de ;a semana 15-- en todo el estado, pero no puedo decir que voy al cien por ciento porque nunca me van a elegir'", dijo el pastor.

De acuerdo con encuestas, la mayoría de los electores en Nuevo México favorece el derecho de las mujeres al aborto. Desde que el pastor declaró la posición que le habría expresado Ronchetti a puerta cerrada, el candidato está enfrascado en una polémica con el pastor, no con la gobernadora Luján.

El meteorólogo de noticieros dice que, si resulta elegido gobernador, se diferenciará de Texas y Arizona, autorizaría el aborto en las primeras 15 semanas de gestación. Pero son pocos los que le creen porque antes había dicho que se oponía completamente al aborto.

"Yo he sido constante en mi posición sobre el aborto, no la he cambiado en ningún momento, pienso que permitir el aborto hasta la semana 15 es más que suficiente y permitirlo hasta el mismo momento del parto es extremo", insiste Ronchetti. Pero luego de esas declaraciones, Smothermon insiste en que el candidato dijo que se opondría a todo "aborto tardío".

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Mientras tanto, la portavoz de la gobernadora Luján, Delaney Corcoran, dijo en comunicado que "Ronchetti puede publicar un plan tras otro para prohibir el aborto si quiere, pero los votantes de Nuevo México saben que él se opone al aborto 'en todas las etapas'", dijo.

Por otra parte, "saben que la gobernadora Lujan Grisham representa todo lo contrario: proteger a las mujeres de Nuevo México y su derecho a tomar sus propias decisiones de atención médica".

El 35 por ciento de los electores de Nuevo México opina que el aborto debe ser legal, un 22 por ciento también o apoya p/ero con algunas limitaciones y el 29 por ciento dice que el aborto debe ser ilegal.