Por primera vez desde que Eric Adams asumió la alcaldÃa de Nueva York, tuvo lugar una significativa protesta frente a su residencia oficial, la Mansion Gracie, en el Upper East Side de Manhattan. El motivo de la concentración fue el rechazo a la polÃtica migratoria del alcalde de dar cobijo a los solicitantes de asilo, saturando el sistema público de albergues y representando un alto peaje en el gasto público.
La manifestación convocada bajo el lema "Ocupemos la Mansion Gracie, salvemos nuestros vecindarios" fue organizada por el rival republicano de Adams en las pasadas elecciones, Curtis Sliwa. De 69 años, Sliwa es el fundador de los ángeles guardianes, una patrulla ciudadana que trabaja por su cuenta para la prevención del crimen. Voluntarios patrullan las calles y el metro de más de 50 ciudades, con el propósito de proteger a las personas del crimen e inseguridad.
La protesta organizada por Sliwa fue contestada por grupos activistas que terminaron enfrentándose a los manifestantes y todo terminó con varios arrestos, entre ellos el del ex candidato republicano a la alcaldÃa. Acusado de obstrucción de la administración gubernamental y alteración del orden público, Sliwa fue liberado tras recibir una multa.
Desbordado como nunca, Adams no descarta instalar un campamento de migrantes en el Central Park
Durante la pelea, el republicano se comparó con el lÃder pacifista del movimiento independentista de la India, Mahatma Gandhi y se burló de Adams. A principios de mes, el alcalde demócrata también se habÃa adjudicado un supuesto "parecido a Gandhi". Según Adams, su pensamiento y acción se emparentan con los del icónico lÃder de la India.
"Venimos de distintas partes de la ciudad a protestar contra los centros para migrantes en nuestros barrios. Queremos demostrar al alcalde que no vamos a dejar que esto pase. Debe dejar de invitar a los inmigrantes", afirmó Sliwa frente a la mansión del alcalde.
Una de las soluciones que propone Sliwa es crear un alojamiento para los recién llegados en Rikers Island, la isla ubicada entre Queens y El Bronx, en el East River, donde existe una conflictiva prisión de máxima seguridad.
"La mitad de los edificios en Rikers Island están vacÃos, hay dormitorios sin usar, cafeterÃas, cocinas... Se tendrÃan que arreglar las tuberÃas, la electricidad y la ventilación. Este podrÃa ser un espacio para 20,000 personas", afirmó.
Adams lleva más de un año buscando ubicaciones para albergar solicitantes de asilo, a la vez que reclama fondos tanto al estado como al gobierno federal. Ya sea como parte de un plan o producto de su impotencia, el demócrata afroamericano ha logrado convertir a la Gran Manzana en el epicentro del debate polÃtico sobre la crisis migratoria.
Desde el Congreso hasta los condados, demócratas y republicanos han estado discutiendo sobre cómo manejar la afluencia de inmigrantes a la ciudad de Nueva York y sus suburbios. Ahora el debate ya se ha trasladado a las calles. Primero fueron protestas de padres de alumnos al intentar ubicar migrantes en los gimnasios de las escuelas. Ahora empezamos a ver las primeras manifestaciones y los resultados de esta tensión social podrÃa tener implicaciones importantes para el control de la Cámara y la campaña de reelección de Joe Biden.
La ola de migrantes que desborda Nueva York le cuesta $12.200 millones a la ciudad
Para los demócratas, el camino para recuperar la Cámara pasa por el Empire State, nombre que recibe el estado de Nueva York. El conflicto intrapartidario de la crisis migratoria podrÃa brindar a los republicanos un punto de ataque en campaña, ya que la frustración de los ciudadanos se ha transformado en acción pública.
Este mes, Adams aseguró que la ciudad habÃa alcanzado su lÃmite de hoteles dispuestos a recibir inmigrantes y comenzó a considerar nuevas ubicaciones de refugio. El plan que se analizó incluÃa desde almacenes y tiendas de campaña hasta una prisión fuera de servicio, además de transportar en autobús a los solicitantes de asilo a hoteles suburbanos. Fue entonces cuando la fiebre polÃtica en Nueva York realmente comenzó a crecer, con una retórica que refleja las fallas nacionales en materia de inmigración.
La multitud que protestaba frente a la residencia del alcalde demócrata de Nueva York estuvo de acuerdo en que las leyes de inmigración existen por una razón y deben ser obedecidas y que el presidente Biden ha dejado abiertas la puerta trasera y la puerta principal. Fue la tercera vez en menos de dos semanas que Sliwa fue esposado mientras protestaba contra sitios de inmigrantes en toda la ciudad.
"Estos inmigrantes se han saltado la cola. Y, por cierto, si yo fuera un migrante y me dieran la oportunidad de saltarme la cola y quedarme en un hotel, darme tres comidas completas... básicamente me darÃan más que lo que tienen las personas sin hogar nacidas en Estados Unidos o los veteranos que están deprimidos. Por suerte, tienen toda la razón, seguirán viniendo", dijo Sliwa a la multitud.
Please do not cut or paste our notes on the web, you have the possibility to redistribute them using our tools.