Las principales organizaciones de defensa de los migrantes en Estados Unidos urgieron al presidente Joe Biden a proteger mediante una orden ejecutiva a unos tres millones de indocumentados que han vivido por mucho tiempo en el paÃs. Lo hicieron en reacción a los planes de colaboradores de Donald Trump de deportar a todos los indocumentados. Los activistas piden a Biden que otorgue el Estatus de Protección Temporal o TPS, por sus siglas en inglés, a los Dreamers y a migrantes sin documentos que han vivido más de una década en el paÃs sin tener problemas en sus comunidades.
"Sabemos que esta es una decisión que solo el Congreso puede tomar, pero ha estado estancada por más de tres décadas", dijo MarÃa Praeli, Directora Adjunta de Relaciones Gubernamentales de la organización Forward, al hablar en nombre de la coalición.
Una reciente encuesta de su organización entre indocumentados reveló que el 68 por ciento ha esperado por lo menos una década que el congreso otorgue algún tipo de protección para que puedan permanecer, la mayorÃa de ellos, al lado de sus familias en Estados Unidos. Muchos son padres de ciudadanos estadunidenses e incluso sostenes familiares. Los Dreamers o soñadores, por su parte, son indocumentados que llegaron cuando eran niños al acompañar a sus padres en su viaje en busca de establecerse en Estados Unidos, y que crecieron como estadunidenses, nacionalidad que consideran propia.
"Yo sé lo que es vivir como indocumentada", dijo Praeli, una joven soñadora, que tuvo alivio a partir del 2012 cuando el ex presidente Barack Obama decretó por orden ejecutiva el programa DACA, siglas que significan Acción Diferida para los Llegados durante su Infancia.
El programa DACA, de manera similar al TPS protege a inmigrantes ante potenciales deportaciones y les permite llevar, temporalmente pero con opción de renovación, una vida similar a la de los residentes legales permanentes en Estados Unidos. Es decir, estudiar, trabajar, pagar impuestos, adquirir vivienda o auto, excepto participar en elecciones. Praeli recordó en conferencia las dificultades que vivieron su madre y ella mientras vivieron sin la orden ejecutiva de Obama, sin poder presentar denuncias y, por el contrario, temerosas de la policÃa, sin acceso a registrar un vehÃculo, o sin permiso para trabajar o recibir atención médica adecuada.
Pero durante el periodo de gobierno de Donald Trump el programa de DACA enfrentó fuertes ataques, incluso demandas para ser desmantelado. Y ahora el ex mandatario mantiene su intención de desmantelar ese proyecto si regresa a la Casa Blanca. El programa de DACA tiene unos 800,000 beneficiarios, pero debido a demandas de la era Trump, ha quedado sin efecto para otros jóvenes indocumentados que esperaban reunir los requisitos para integrarse.
Las organizaciones pidieron "una acción crÃtica por parte del presidente Biden" que prevenga ataques contra inmigrantes que prácticamente ya han hecho su vida en el paÃs "en protección de las familias estadunidenses", dijo Praeli. El mes pasado, el arquitecto de las medidas más severas contra los migrantes durante la presidencia de Trump, Stephen Miller, dijo en entrevista que si Donald Trump gana la reelección habrá deportaciones masivas desde el primer dÃa de su gobierno.
Miller dijo que el plan es galvanizar la frontera con México y echar del paÃs a "diez millones de ilegales", que equivale aproximadamente a toda la comunidad de indocumentados que extraoficialmente se estima que viven ahora en Estados Unidos. Dijo que "Los dos objetivos polÃticos sobre los cuales Donald Trump procederá con absoluta determinación: sellar la frontera, que no entren ilegales, que aquà todos salgan". Por esos planes, entre otros motivos, las organizaciones piden urgentemente a Biden otorgue el TPS a Dreamers y migrantes que han residido en el paÃs por largo tiempo.
El programa de Estatus de Protección Temporal renovable contra deportaciones protege ahora mismo a unos 610,000 migrantes de 16 nacionalidades, de acuerdo con cifras oficiales. Una decisión en ese sentido se vuelve más crÃtica por cuanto el tema de la migración ha cobrado relieve en las campañas electorales.
Trump asegura que deben sellar la frontera y deportar a todos los indocumentados, según dice, para combatir el narcotráfico y controlar la criminalidad. Fuentes de la Casa Blanca adelantaron por su parte a Reuters esta semana que están sopesando formas de proporcionar estatus legal temporal y permisos de trabajo a inmigrantes indocumentados en Estados Unidos que estén casados con ciudadanos estadounidenses.
Por su parte The Wall Street Journal explicó que serÃa un plan de "libertad condicional donde ahora se encuentren" esos migrantes casados con estadunidenses.
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