Otro nuevo dolor de cabeza se le suma a Joe Biden en términos de noticias económicas. Con la inflación descontrolada que crece a una tasa del 8,5% anual, empezaron a subir las tasas de los créditos hipotecarios para comprar una vivienda. Esto, sumado al aumento de precios de las propiedades en todo el país, hace que el costo mensual que una familia tiene que afrontar para pagar sus hipotecas sea cada vez más alto.

Los números son lapidarios para Biden. En enero de 2021, cuando asumió el demócrata, la tasa hipotecaria a 30 años era del 2,65% y el precio promedio de una vivienda nueva en el país era de 401.700 dólares. Hoy en día, la tasa hipotecaria a 30 años es del 5,20% y el precio medio de una vivienda nueva es de 511.000 dólares.

Otro "Cisne Negro" para Biden: pronostican que la economía llegará en recesión para las elecciones del 2024

La tasa de interés promedio del préstamo hipotecario más popular está en máximo de 12 años y ya se está observando una merma en los compradores (una señal de que el objetivo de la Reserva Federal de enfriar el mercado inmobiliario podría estar comenzando a tener un impacto) según datos de Mortgage Bankers Association (MBA).

Según cálculos de Charlie Bilello, el CEO de Compound Capital, suponiendo un pago inicial del 20% (el downpayment para ingresar a la propiedad), representa un aumento del 72% en el pago mensual (de 1.294 a 2.222 dólares). 

La suba de tasas de interés de referencia por parte de la Reserva Federal lanzará más leña al fuego: en su reunión de mayo ya avisó que las incrementará en 50 puntos básicos y que seguirá con esa misma tendencia este año para frenar la escalada de la inflación. Automáticamente eso encarecerá el crédito y el costo de acceder a una vivienda

Si bien la tasa actual es la misma que en abril de 2010, el precio promedio de la vivienda en el país se ha duplicado durante ese tiempo y muchas ciudades aumentaron aún más. Por ejemplo, Phoenix, Tampa, Miami, Seattle, San Francisco, Las Vegas y Denver tuvieron incrementos de más del 130%.

Tal como sucede con la inflación, una batalla perdida al menos este año, el costo de las hipotecas se volverá la nueva pesadilla política para el presidente. Las críticas se hacen escuchar. "La tasa fija a 30 años está en su punto más alto en 12 años, el aumento más rápido en los costos de financiamiento de viviendas en décadas. La aplastante economía de Biden y los demócratas ha hecho que sea más difícil para los ciudadanos realizar el sueño americano de tener una vivienda propia", afirmó Nicole Malliotakis, congresista republicana por Nueva York.

Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal

AP

La economía y principalmente la inflación son el talón de Aquiles del Partido Demócrata. Según todas las encuestas, es la preocupación número uno de la población, algo que sepulta la suerte demócrata para las elecciones de mitad de término en noviembre y siembra muchas dudas para las presidenciales del 2024. 

Según cálculos de Charlie Bilello, suponiendo un pago inicial del 20%, representa un aumento del 72% en el pago mensual (de 1.294 a 2.222 dólares). Si bien la tasa actual es la misma que en abril de 2010, el precio promedio de la vivienda en el país se ha duplicado. Phoenix, Tampa, Miami, Seattle, San Francisco, Las Vegas y Denver tuvieron incrementos de más del 130%

La última encuesta de Quinnipiac, publicada el 13 de abril, colocó el índice de aprobación de Biden en solo el 33 por ciento. Una encuesta de CNBC publicada el 11 de abril colocó el índice de aprobación de Biden en un 38 por ciento, con números particularmente malos en su manejo de la economía, tradicionalmente el tema más importante en cualquier elección. 

Con la inflación en alza, el 47 por ciento de los encuestados calificó la economía como "pobre", el número más alto desde 2012. El 56 por ciento espera una recesión el próximo año. En general, el índice de aprobación de Biden sobre el manejo de la economía cayó al 35 por ciento, cuatro puntos menos que el nivel de la encuesta anterior, con un 60 por ciento de desaprobación.

La suba de tasas de interés de referencia por parte de la Reserva Federal que comanda Jerome Powell lanzará más leña al fuego: en su reunión de mayo ya avisó que las incrementará en 50 puntos básicos y que seguirá con esa misma tendencia este año para frenar la escalada de la inflación. Automáticamente eso encarecerá el crédito y el costo de acceder a una vivienda; además de encarecer los préstamos preexistentes que ajustan por una tasa variable.