El Banco Central emitió este martes $8.627 millones al reducir su stock de Leliqs, por lo que en su poder tiene en sus arcas $2,062 billones que aspiró mediante Letras de Liquidez. Por ellos, deberá pagar en los próximos 28 dÃas unos $60.260 millones. Y además, mantiene un stock de pases pasivos por otros $1,640 billones que también deberán pagar intereses en los próximos dÃas. AsÃ, en total le debe al sistema bancario $3,702 millones, lo que representa prácticamente 37.000 millones de dólares (a tipo d cambio oficial) de pasivos remunerados o 10% del PBI.
El número prende alarmas porque se trata del nivel de Lebacs que llegó a acumular Sturzenegger antes de que los inversores se dieran vuelta y se desatara la primera corrida contra el dólar de 2018. Y porque todos los meses hace que el Banco Central erogue más de $80.000 entre intereses de pases y Leliqs. Solo de Leliqs en lo que va del año se pagaron $317.245 millones y por eso es necesario achicarla.
Advierten una bomba de Leliqs: El Central gasta más de $80.000 millones por mes en pagar intereses
Esta deuda que el Banco Central mantiene con los bancos para evitar que los pesos desborden en inflación no van ni al sector privado ni tampoco al Tesoro, aunque la idea del Gobierno es que gradualmente se vuelquen en la economÃa, principalmente mediante un cambio gradual en las preferencias de los inversores, que poco a poco vuelvan a prestarles al Estado y a los privados a más largo plazo.
Al fin y al cabo, para que la bola de pasivos remunerados -no solo de las Leliqs, sino también la de los pases- deje de ser una preocupación es necesario ralentizar su crecimiento, que en las últimas cuatro semanas due en dólares del 3,5%. O bien conseguir que los activos del Banco Central suban mucho más rápido, algo que de la mano de la compra de reservas se viene verificando en los últimos meses. Si se toman los datos al 10 de junio -último valor disponible- en cuatro semanas las Reservas Internacionales subieron 4,1%.
Por lo pronto, desde octubre -medidas en moneda fuerte- las Leliqs se mantienen estables, mientras que los pases se aceleraron a partir de febrero.
Para achicarla, lejos está de las posibilidades o de las intenciones del Gobierno el cancelarla con dólares contantes y sonantes como hizo el Banco Central de Uruguay en marzo de este año que recompra sus Leliqs (allá llamadas Letras de Referencia Monetaria) con dólares de las reservas al tipo de cambio que quiere sostener y frena cualquier presión devaluatoria. Fue lo que intentó hacer Sturzenegger primero y Caputo después con los dólares del FMI y no les funcionó.
En cambio, en el Gobierno apuestan al pase gradual de los bancos primero y -de los ahorristas después- de las Leliqs a activos del Tesoro. La señal ya la dio el Directorio de la autoridad monetaria la semana pasada cuando permitió que parte de los encajes bancarios se constituyeran con un bono del Tesoro al 2022.
Y aunque un sector del Gobierno puso sobre la mesa la posibilidad de implementar un mini plan Bonex que canjee las Leliqs por bonos de mayor plazo, en el Banco Central consideran que eso, de forma arbitraria, serÃa una locura porque detrás de cada peso depositado en sus arcas mediante Leliqs hay un ahorrista que a fin de mes querrá cobrar su plazo fijo. Si se les quitara la liquidez de corto plazo a los bancos, los damnificados serÃan los ahorristas.
En cambio, si se bajara la tasa de interés para suavizar el ritmo al que crecen las Leliqs, entre analistas y economistas del Gobierno estiman que lo primero que sucederÃa serÃa que los bancos no usarÃan esos pesos para prestárselos a las empresas. En su lugar, trasladarÃan la baja de tasas a los depositantes, que huirÃan en manada hacia el dólar paralelo u otros activos de refugio. Esto harÃa subir fuertemente la brecha cambiaria, desatando fuertes expectativas de devaluación y recalentando la inflación.
De hecho, en el Banco Central estarÃan más tranquilos si hubiera un mercado de capitales capaz de actuar como canal de desagote del exceso de liquidez hacia otros activos. Las empresas podrÃan tomar deuda directamente en la Bolsa, colocando cheques y bonos privados. Sin embargo, este proceso es lento; incluso si en 2020 la capitalización de pymes creció un 100% respecto de 2019.
Y también podrÃa financiar al Tesoro para que no le pida al Banco Central que le financie el déficit. De hecho, este es el núcleo de la gestión financiera de Guzmán: la normalización de la tasa de interés en pesos.
Pero mientras este canal aliviador no esté robusto, el temor es que los pesos desborden hacia el dólar paralelo o hacia los precios. Y aunque a tipo de cambio paralelo, los pasivos remunerados del Banco Central equivalen a 22.500 millones de dólares, lo cierto es que el poder de fuego de las reservas lÃquidas es mucho menor y no bastarÃan para evitar una devaluación, ni para ponerle freno a la inflación.
Los consultores, en cambio, apuntan a que para desarmar la bola de Leliqs es clave atacar su origen: el déficit fiscal. Si el gobierno no hubiera "echado mano a la maquinita", el Banco Central no deberÃa estar aspirando pesos mediante Leliqs. "Esta deuda no es igual a cualquiera. Acá cuando el Banco Central no la puede pagar, emite más pesos. Asà que el riesgo es más inflación. Y ese riesgo básicamente se materializa cuando los depósitos de los ahorristas en plazos fijos no crece tanto como las Leliqs, que son su contrapartida. Por eso, lo que se puede hacer para contener su crecimiento es dejar de emitir. Es contabilidad básica", dijo a LPO el economista Gabriel Zelpo de la consultora Seidó.
"La inflación lo que hace es licuar la misma emisión inercial para pagar los intereses de las Leliqs. Lo que importa acá es cómo crece en comparación con el crecimiento real de la demanda de dinero y, sobre todo, que no haya una caÃda abrupta de la demanda de pesos. O sea, todo shock puede afectar a la sostenibilidad en general, como ser una ruptura con el FMI como pide una parte de la alianza del Gobierno, pero sin llegar a tanto, una ‘fiesta' electoral que repita la emisión de 2020 puede ser suficiente", agregó.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.
Sigan asi, desparramando fake news solapadamente
En lugar de eso, aumentan los impuestos por inflacion matando a las pymes y mandan a los gremios a arreglar por abajo de la inflacion matando el consumo...
Claro al cerrar importaciones parece que nos va Bien, cuando la realidad es todo lo contrario... Los trabajadores registrados, que son cada vez menos, siguen endeudados y el consumo es apenas circunstancial... Y la pobreza y el desempleo no paran de crecer...
En este modelo solo ganan los que ya estan acomodados y tienen capacidad de ahorro hace decadas y excluye a casi el 80% del pais... Pero claro esos pocos estan incrustados en todos los organismos del estado y la política entonces aprietan este modelo que solo fomenta la pobreza y premia a los acumuladores de capital... Salvo alguna tramoya menos por aqui y por alla a algunos grandes, obvio, son los q no aportaron...
Y mientras la que junta el estado, que no es poca, la tiene ociosa abajo del colchón en lugar de volcarla a la economia para producir crecimiento... Apenas si aprietan un poquito la obra publica con emision, mientras ajustan en absolutamente todo lo demas, que en teoria podria provocar crecimiento a mediano plazo, pero la mayoria de las obras que hacen son favores politicos pelotu2 y no aportan una mierda a la economia real...
en el caso que la gilada despierte abruptamente, algún plancito bónex a medida (corte arbitrario por monto en plazos fijos), un golpecito (o no tanto) de devalueta, "reperfileta" arbitraria de deuda del tesoro estilo lacunza, todo para ir licuando los $$$ de la gilada contra la inflación real de la calle, jaja, esta es la política monetaria argenta de los kukas, no muy diferente a la de los globertos...