
El fin de las restricciones anunciadas por el Reino Unido para el jueves abre el interrogante sobre la situación argentina. Con menos vacunados, más casos, pero menos muertes Boris Johnson decidió eliminar los últimos protocolos vigentes. Especialistas consultados por LPO aseguraron que el porcentaje de fallecidos vacunados es muy bajo y que medidas como el pasaporte sanitario apuntan sobre todo a terminar con los no vacunados más que a cuestiones de salud.
Se trata de una medida que en parte tiene relación con la caÃda de su imagen, pero también una apuesta a la vuelta a la vieja normalidad. "A partir del jueves (...) pondremos fin a la obligación legal de autoaislarse tras una prueba positiva", dijo Johnson el lunes a los diputados en el Parlamento el lunes.
Piden la renuncia de Boris Johnson por haber participado de una fiesta en pleno confinamiento
En enero el Reino Unido habÃa terminado con la mayor parte de las restricciones y la obligación de utilizar barbijo solo se aplicaba a los hospitales, mientras que también dejó de ser necesaria la constancia de presentar un carnet de vacunación para ingresar a lugares de esparcimiento.
En la Argentina, a tono con lo dispuesto por el gobierno porteño, Nación quitó la obligatoriedad del tapabocas para los menores de seis años, pero la mantuvo para el resto de la escolaridad.
DÃas atrás, durante un acto con gobernadores e intendentes el Presidente aseguró: "el 2 de marzo vamos a dar vuelta la página de la penuria. Vamos a iniciar el ciclo lectivo de todos. Vamos a olvidarnos de tener la cara tapada. Vamos a volver con toda la fuerza".
Más allá de las palabras de Alberto, dos epidemiólogos consultados por LPO coincidieron en que sostener las restricciones con un porcentaje tan alto de la población vacunada "no tiene demasiado sentido" y que los casos graves o fallecimientos de personas vacunadas con bajos o muy bajos respecto de los no vacunados.
"El pasaporte sanitario tiene solo el sentido de penetrar en el nicho de los antivacunas, que son un porcentaje menor de la población", le dijo a este sitio un epidemiólogo que prefirió mantener el anonimato.
En el Reino Unido, hay opiniones dispares sobre las consecuencias que podrÃa tener decretar el fin de las restricciones, pero sà acuerdo en que debe haber un seguimiento de la enfermedad.
Una de las ventajas que tiene la situación argentina en comparación con la del Reino Unido es el avance de su campaña de vacunación. En la Argentina alcanzó el 88% de inoculados con al menos una dosis y un 78% con esquema completo (9,7% con una sola dosis). El Reino Unido tiene al 72% de su población con el esquema completo y 78% con al menos una dosis.
El 11 de enero el Reino Unido tuvo 2295 casos por millón de habitantes contra 2233 en la Argentina. Es cierto que la positividad en la Argentina fue ocho veces mayor y eso implicarÃa muchos casos que no fueron detectados por el sistema. En esa fecha la mortalidad por millón en el Reino Unido fue de 3,5 habitantes y en la Argentina del 0,9%.
Con el correr de las semanas en el Reino Unido cayeron los casos hasta llegar a 1091 el 2 de febrero. Ese dÃa en la Argentina se registraron 1073, un número similar pero con una alta positividad, ocho veces mayor que en el paÃs europeo (40% contra 5%). La mortalidad se mantuvo relativamente constante en el Reino Unido (3,33%), mientras que en la Argentina se elevó hasta 5,68%, algo esperable por el aumento de casos ocurrido semanas antes.
El 21 de febrero el Reino Unido contabilizó 645 casos por millón de habitantes, casi un tercio de los registrados el 11 de enero, mientras que en la Argentina hubo 285 nuevos infectados por millón. La positividad fue tres veces mayor en la Argentina y los muertos por millón volvieron a acercarse: 2,11 en el Reino Unido y 3,45 en la Argentina.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.
Una pena que le arruinaron la vida a dos generaciones con cuarentenas que ahora resulta que "fueron al pedo, salgan a consumir, hijos de puta"