La capacidad del peronismo para convertir sus diferencias internas en alternativas electorales que van tiñendo todo el espectro político es historia conocida. Esta vez fue una foto “de gestión” entre el intendente de Almirante Brown, Darío Giustozzi y su colega de La Plata, Pablo Buera, la que movió el tablero.
Giustozzi es uno de los intendentes estrella de la camada de nuevos jefes comunales que en su momento alcanzó el poder de la mano de la renovación que empujó Néstor Kirchner en el Conurbano y luego aletargó.
Con mediciones que lo ubican en su distrito por arriba del 50 por ciento de imagen positiva, rivaliza con su colega de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, por mostrar la gestión más dinámica de la zona sur.
Sin embargo, Giustozzi había estado curiosamente ausente de las movidas que este verano articuló Julio de Vido con intendentes bonaerenses, que tuvo su foto más amplia en el encuentro de Santa Teresita. Desplazamientos que llevaban la firma indeleble de la nueva obsesión kirchnerista: aislar a Daniel Scioli y Sergio Massa.
Hasta ahora, los jefes comunales que protagonizaban esta algarada eran Insaurralde y Fernando Espinoza de La Matanza, el primer mencionado como posibles candidatos a diputados nacional detrás de Alicia Kirchner y el segundo para conducir el PJ bonaerense junto a Julián Domínguez, el otro gran articulador de este movimiento que excluye a La Cámpora y los Unidos y Organizados que intenta reflotar Gabriel Mariotto para buscarse un lugar bajo el sol oficial.
Reunión en La Plata
Sin embargo, sería un error ubicar a Giustozzi por fuera del entramado kirchnerista. El lunes pasado estuvo reunido con De Vido y como todos los que transitan ese despacho por estas horas de recuperada vitalidad política del ministro, adscriben a las posiciones de la Casa Rosada en su conflicto con Scioli.
Pero a diferencia de sus colegas que protagonizan el armado kirchnerista en este momento, las movidas de Giustozzi apuntan más al 2015. Por eso la reunión con Buera, otro de los jovenes intedentes que tiene aspiraciones para el futuro.
Giustozzi tiene una senadora y un diputado provincial, Franco Caviglia, a quien se le vence el mandato este año. Si logra mantener esa banca o incluso acrecentar su presencia legislativa, se daría por más que satisfecho en el actual turno electoral.
Como varios de sus colegas, Giustozzi viene trabajando el tema de la seguridad como plataforma de su proyección provincial. De eso también hablaron con Bruera, al igual que recordaron sus épocas de estudiantes cuando el intendente de La Plata encabezaba la lista peronista de Derecho, mientras Giustozzi lo hacía en Ingeniería.
Bruera está hoy nuevamente encuadrado en el dispositivo kirchnerista y mantiene línea directa con Florencio Randazzo, que fue clave para que Cristina le diera finalmente la lista en las pasadas elecciones.
