Tras la cancelación de vuelos internacionales, el Gobierno apuntó de lleno contra la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), conducida por Ricardo Cirielli. Y lo hizo de la manera más drástica: vía el Ministerio de Trabajo, pidió a la justicia que le retire la personaría jurídica.

Especialistas consultados por LPO no recordaron una solicitud similar, salvo el antecedente de la Alianza con el mismo gremio en 2001. Pero, remarcaron, nadie llega tan lejos porque existen certezas que en este caso no aparecen.

“Pedir el quite de personería es una facultad que tiene el Gobierno cuando no se acata la conciliación obligatoria. Pero la verdad es que casi siempre se acatan, justamente para evitar este paso”, simplificó Teodoro Sánchez de Bustamante, ex presidente del Colegio Laboralista de Argentina y América Latina.

Lo insólito de este caso es que APTA asegura que nunca hizo paro sólo que frenó vuelos porque no estaban condiciones de cumplir el servicio y, por lo tanto, no tenía conciliación obligatoria que acatar.

“Todo fallo sienta precedente, pero si esto se judicializa sería interesante la defensa del sindicato que debería especificar algo tan elemental como que nunca hizo paro. Si le sumamos el conflicto por las cenizas, el proceso llevaría una acción pericial intensísima”, agrega el abogado.
Uno de los debates que se plantearía es, por ejemplo, porque la presidenta canceló para mañana su viaje del viernes a Rosario si es que las cenizas no era un problema.

Respecto a los vuelos internacionales, la coartada de Cirielli es bien específica: asegura que cinco de los diez aviones de larga distancia no estaban en condiciones de operar y lo prueba en que uno quedó varado en Roma, donde su gremio no ejerce el control.

El diputado Roberto Mouillerón, ex ministro de Trabajo de la provincia de Buenos Aires entre 2003 y 2007, cuando inició las discusiones paritarias en ese distrito, entiende también que el gobierno hace un pedido legítimo pero sólo si el paro existió.

“En caso de no cumplirse la conciliación obligatoria los ministros pueden pedir que se quite la personería de los gremios, que se intervengan los sindicatos o se aplican multas costosísimas. Para evitar esas sanciones, por lo general los gremios acatan y vuelven a negociar”, explicó.

“Por eso este caso es raro y sin precedentes que se recuerden. Sin duda, el gremio deberá demostrar que no hizo paro y si es así todo queda en la nada”, presagió. La justicia avanzará en los próximos días con el pedido del Gobierno y todas estas cuestiones se pondrán en relieve.