Clarín y La Nación echaron a los representantes del Estado en Papel Prensa, la empresa que provee papel a los diarios de todo el país.

La Sindicatura General de la Nación (Sigen) envió un comunicado denunciando que en la Asamblea Ordinaria de Accionistas de hoy, los dos diarios removieron a los 3 directores (Beatriz Paglieri, Pablo Cerioli y Eduardo Gallo) y a los síndicos de parte del Estado de la empresa.

Según la Sigen, la asamblea se realizó sin que se cumplan los requisitos legales establecidos y por esta razón, la Comisión Nacional de Valores la declaró nula. Como previa del conflicto, ayer el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, había acusado a los gritos al juez Fernando Durao, que entiende en la causa, de ser amigo de uno de los abogados de la empresa.

Pese a eso, hoy se realizaron dos asambleas en Papel Prensa. La primera fue al mediodía y no contó con la participación de los directores por parte del Estado, aunque allí si estuvieron el Síndico General de la Nación, Daniel Reposo y el titular del Consejo de Vigilancia de la empresa, Alberto González Arzac.

Luego, en una nueva asamblea realizada a las 18, se sometió a votación el desempeño de todos los directores y Clarín y La Nación propiciaron una acción de remoción y responsabilidad sobre los tres directores del Estado y los síndicos.

Reposo anticipó a La Política Online que la fuerte jugada de Clarín y La Nación responde al avance de una serie de investigaciones contra esos grupos, llevadas a cabo por los representates del Estado.

Reposo estimó que para convocar una nueva asamblea deberán pasar al menos unos 40 días, en los que el Estado no podrá ingresar a Papel Prensa. El funcionario advirtió que Clarín y La Nación utilizarán en ese lapso para destruir la documentación y evidencia existente.

Fuentes de Papel Prensa señalaron a LPO que como aún la Justicia debe pronunciarse, los directores pueden seguir yendo.

En tanto que Reposo, señaló que entre esas investigaciones se encuentra una supuesta licuación de una deuda millonaria contraída por los dos grupos de medios en plena crisis de 2001. Según Reposo, Clarín y La Nación recibieron períodos de gracia de hasta tres años para pagar sus deudas.

Además de una quita del 67 por ciento de la deuda, según Reposo la tasa de interés que se les impuso es del 2 por ciento anual, lo que representa un “desfalco”.

Desde Papel Prensa señalaron que lo de la quita es falso y que el tema de la deuda “no es importante”, ni se está tratando. Aunque admitieron una posible refinanciación de la deuda para La Nación.

Por otra parte, Reposo explicó que mediante una maniobra de “patoterismo jurídico”, el Grupo Clarín inició acciones civiles por daños y perjuicios contra los miembros del Estado en Papel Prensa.

El Síndico adelantó además que en la asamblea se nombró como auditor externo a un contador de Brea Solans y asociados, un estudio del Grupo Clarín, según el funcionario, que explicó que la designación del auditor debió haberse hecho por concurso.