La intelectual y ensayista Beatriz Sarlo habló del apoyo del Frente para la Victoria a Daniel Scioli y resaltó que “Cristina se dio cuenta que tenía que ganar con Scioli en vez de perder con Randazzo”. A la vez, opinó que “como ella no es una política con timing tardó en darse cuenta”, por lo que “si lo hubiera aceptado antes no hubiera quedado como una sobreactuación”.

“Es muy difícil pararse a aplaudir en un discurso de Scioli”, dijo tras el gesto de Cristina ante el gobernador bonaerense en el acto en Cañuelas.

En diálogo con La Once Diez afirmó que “los Kirchner son humilladores desagradables, lo fueron siempre”, pero que aún así “el PJ no en vano tiene la palabra lealtad por sobre las otras palabras”. “Lealtad lo que significa es callarse frente al que tiene el poder en el PJ ese momento”, reflexionó.

En este contexto, pronosticó que el candidato presidencial podrá encolumnar detrás de sí a todo el oficialismo debido a que “el Presidente tiene la lapicera para firmar los envíos del tesoro en un país donde las provincias dependen de la obra pública que se hagan con dinero nacional”. Y ejemplificó: “Ya vemos gente como Wado de Pedro que contemplan con ecuanimidad al que podría ser su próximo presidente”.

Sin embargo, aclaró que “La Cámpora a Scioli no le resultará tan fácil como Mariotto”.

Al ser consultada sobre la candidatura de Carlos Zannini a vicepresidente, quien al igual que ella tuvo un pasado maoísta, Sarlo expresó su opinión: “Zannini provoca en mí una especie de revival de las frases que decíamos los maoístas hace 20 años. Toda una serie de frases campesinas ridículas que decíamos los maoístas urbanos. Zannini se va a alinear respecto de lo que considera la contradicción principal”.

Por otro lado, acerca de lo que fueron los comicios porteños, la intelectual sostuvo que Martín Lousteau “demostró coraje político” y “soportó presiones terribles”. Además, celebró que se autodefina como “socialdemócrata” y dijo que “es un candidato muy inteligente”. “Es bueno hablando de sus ideas y eso es todo lo que sabemos de él por el momento. Su futuro político está en sus manos y en manos de la suerte”, manifestó.

Asimismo, Sarlo señaló que “no hay que olvidar que el Partido Socialista puso su militancia” y expresó sus dudas sobre el apoyo de la Unión Cívica Radical a Lousteau: “Nadie me va a hacer creer que los radicales sesentones movieron su gente para que le pegaran afiches. Es indemostrable. Esos radicales estuvieron ausentes. Y Sanz obviamente no tenía otro recurso que apoyarlo porque era el capital que podía llevar a la interna de Cambiemos”.

En cuanto al rol de Lousteau durante su paso por el Gobierno nacional como Ministro de Economía, sostuvo que “la 125 no fue una catásfrofe” sino que “una catástrofe fue cómo la manejó el kirchnerismo”. “El error fue dejar que se unieran la Sociedad Rural con Buzzi. Ahí los pequeños chacareros no tendrían que haber pagado ese porcentaje de retenciones”, concluyó.