Las agrupaciones Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT) y Autodeterminación y Libertad (AyL) reunieron solo un 7 por ciento de los votos en la elección de jefe de Gobierno porteño, mientras que lograban ingresar un representante por fuerza a la Legislatura local, cuando se había escrutado más del 92 por ciento de las mesas.

Con la candidatura a jefa de Gobierno porteño de Myriam Bregman, el FIT logró el 3,10 por ciento de los votos, mientras que ascendió a un 4,76 por ciento de los sufragios para la categoría de legisladores de la Ciudad. Mientras tanto, AyL propuso al ex diputado nacional Luis Zamora para la jefatura de gobierno capitalino y conseguía 3,97 por ciento de los votos para ese cargo, por lo que se instalaba cuarto en las preferencias.

Esta última fuerza, para la categoría legisladores sumaba el 3,93 de las voluntades.

En cambio, el frente Camino Popular, que postulaba al joven economista Itai Hagman para la Legislatura de la CABA (no llevaba candidato a jefe de gobierno porque el diputado nacional Claudio Lozano no logró superar el piso de las PASO en esa categoría), se quedaba en la puerta con el 2,49 por ciento de los votos, a centésimas del 2,9 que se calculaba como piso para entrar el reparto de escaños.

Según las estimaciones de los comandos electorales, el FIT sumaba un nuevo legislador y pasaba a tener un bloque de dos miembros en la Legislatura local.

Ese espacio de hegemonía trotskista ya cuenta con un representante, el referente del PO Marcelo Ramal, quien había ingresado en las elecciones de 2013 y debía dejar su banca por un acuerdo de rotación en manos del dirigente del PTS Patricio del Corro.

Esta noche se descontaba que Ramal ingresaba para un nuevo mandato, ya que encabezaba la nómina para el parlamento porteño. AyL, de Luis Zamora, volvió a mostrar que todavía tiene seguidores en la ciudad, ya que lograba instalar a Fernando Vilardo, con lo cual esa fuerza volvería a tener representantes en el Legislativo capitalino, aunque años atrás llegó a tener 8 legisladores que por desavenencias políticas y disputas internas se terminó diluyendo y casi desaparece de la escena política porteña.

Por su parte, Ramal, en declaraciones a la prensa, confirmaba que "el FIT con seguridad tendrá otro legislador en el parlamento porteño" y apuntó que estaban "alertas" para ver si conseguían sumar un tercer legislador.