Un nuevo video dejó en ridículo al precandidato a gobernador Francisco de Narváez, que anoche intentó justificar su salvaje agresión al director de la agencia platense NOVA, Mario Casalongue, planteándolo casi como una competencia deportiva: "Estábamos solos, dos hombres", dijo con cara de enojado a Joaquín Morales Solá en su programa de TN.

Esta tarde, NOVA difundió las cámaras de seguridad del edificio donde tiene su redacción en las que se ve claramente que De Narváez ingresa acompañado por un voluminoso patovica que apenas pasa por la puerta; y luego de la golpiza se retira siempre custodiado por su guardaespaldas.

Las tomas de las cámaras de seguridad muestran a De Narváez llegando al edificio de la ciudad de La Plata, donde se encuentra la redacción de Nova, junto a un custodio personal vestido de civil. Ambos chequean la dirección desde afuera del edificio y luego ingresan y pasan hacia el ascensor tras saludar rápidamente al personal de la recepción.

De Narváez que ayer concurrió al programa de TN junto a su mujer Agustina Ayllon, a quien las cámaras tomaban cada vez que el mencionaba que había sido injuriada por la nota de Nova, ensayó una contradictoria justificación: "Estoy convencido que la violencia no es el camino, pero no voy a permitir que insulten a mi mujer", afirmó.

Las imágenes confirman la crónica que en exclusiva dio en su momento LPO, que revelan que De Narváez agredió al periodista bajo la protección de un custodio entrenado, que aprovechó para sacar fotos de Casalongue golpeado, sangrante e inconsciente en el suelo, luego que De Narváez le rompiera la boca de una trompada.

Elisa Carrió en el mismo programa, salió a defender ayer el brutal ataque de De Narváez. La diputada aseguró que Casalongue “es un extorsionador profesional" por lo que se mostró de acuerdo con la insólita reacción de su colega. "Como dijo el Papa, hay veces que un cachetazo viene bien", argumentó.

"Fue la reacción de un hombre frente a una infamia", sostuvo la diputada en una entrevista con Joaquín Morales Solá, donde recordó que ella también defendió la agresión de la diputada massista Graciela Camaño al kirchnerista Carlos Kunkel."Toda la política dijo 'esto es incorrecto' y yo dije 'que justa fue esa trompada'", dijo sonriente.

"Yo defiendo a De Narváez, para que no queden dudas", concluyó, sin opinar sobre la irrupción de De Narvaez en la redacción haya sido junto a patovica, y la posterior amenaza a las tres periodistas que estaban en el lugar, para que borren la nota que le molestaba.