Luego del almuerzo con el Papa, Cristina Kirchner reveló en su charla con la prensa antes de abordar el avión que la llevó a Nueva York, que "hace unos dÃas" (veinte según el Secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli) dos comisarios, uno de la PolicÃa Federal y otro de la PolicÃa Bonaerense, advirtieron que habÃa sido amenazada por el Estado Islámico, según ClarÃn.
El también llamado Califato de Irak y Siria es una organización extremista ultraislámica que ya mostró decapitaciones de prisioneros en televisión y que controla amplios territorios en los dos paÃses, incluso zonas petrolÃferas que le rinden muchos millones de dólares.
Las amenazas, según contó la Presidenta, se basarÃan "en la amistad con el Papa y la defensa agentina de la existencia de dos Estados: Palestina e Israel", dijo.
La denuncia quedó bajo investigación judicial y de la SecretarÃa de Inteligencia del Estado.
Cristina dijo que la amenaza no le causaba temor y que no se habÃan adoptado medidas extras de seguridad. "TendrÃamos que vivir bajo una cama", comentó restándole importancia al tema.
Con Francisco, dijo, comentaron el asunto. "Defendemos cosas que molestan a algunos y no sabés si son ciertas o si son algunos actores que las usan para imputárselas a otros".
