El presidente Andrés Manuel López Obrador visitó el municipio de Ecatepec en el Estado de México para hacer entrega de apoyos de los Programas Integrales para el Bienestar, en donde lanzó una bomba: "No crean que tiene mucha ciencia el gobernar". "Eso de que la política es el arte y la ciencia de gobernar, no es tan apegado a la realidad", completó.

Esta redacción consultó a expertos en políticas públicas y comunicación sobre el "estilo personal de gobernar", para recordar el segundo volumen de la clásica tetralogía de Daniel Cosío Villegas, donde enmarcó su visión sobre el sistema político mexicano. Ante el cambio de régimen que dice impulsar Morena y que bautizó como la Curta Transformación, el comunicólogo Gerson Hernández señaló que la zona de confort del mandatario federal es "la asamblea".

"No piensa ni le habla a los analistas (estilo Leonardo Curzio o Leo Zuckermann), a quienes manejan los datos duros, las cifras inobjetables, las cuales pese a todo -las fluctuaciones, las mediciones poco optimistas del desempeño del nuevo gobierno en estos meses- no han impactado aún en las encuestas de popularidad de AMLO", explicó Hernández Mecalco.

AMLO: "No crean que tiene mucha ciencia el gobernar"

De acuerdo con el académico de la UNAM, López Obrador "gobierna-comunica" en la plaza, la asamblea. Y recordó que el Taller de Comunicación Política de Luis Estrada Straffon analizó que durante los primeros meses de las conferencias mañaneras en Palacio Nacional el presidente respondió 60% de preguntas de personas sentadas en la primera fila, tardando entre 15 y 10 minutos por cada pregunta. 

"Ahora duran el doble sus respuestas, con el objeto de responder menos preguntas y todavía en un porcentaje menor preguntas complicadas", apuntó Gerson Hernández. Para el abogado José Alfredo Gutiérrez, "Andrés Manuel es un genio mediático, cuya pedagogía mediática se basa en repetir una y otra vez -con leves modificaciones o agregando comentarios coyunturales- el mismo mensaje en las plazas públicas".

Por lo que, para el también maestro por la Complutense de Madrid, en realidad se trata de una "nueva forma de gobernar" que probó desde que fue Jefe de Gobierno. "Es la evaluación diaria de una persona que tiene una información amplia, completa, y que contradice a los medios tradiciones por su sesgo mediático, los cuales crean la posverdad, son medios patronales, como dicen en Chile".

No obstante, un comentario del líder de Morena en el Senado sobre "mejorar la situación" -es decir, "reconciliación"- con "los medios, inversionistas y empresarios", reveló posibles fallas en la organización de Palacio Nacional. "Al presidente lo veo muy activo, dinámico, no descansa, no ha descansado un solo momento, y veo un gabinete que no está en el acompañamiento", dijo esta mañana Ricardo Monreal.

Y agregó que para el grupo de colaboradores del Ejecutivo "la curva de aprendizaje ha sido larga, pesada, y me gustaría un gabinete más cercano". "El presidente hace todo, conduce todo, y necesita que su gabinete lo acompañe más".

"No creo que sea un gobierno de un solo hombre. Es un presidente presente en todos los temas, como debería ser, más si se considera que es el arranque de su sexenio. Él está supervisando uno a uno. Con contacto directo, pero sabe delegar muy bien a gente experta. Ahí están Luisa María Alcalde, la secretaria Albores. Ahí tienes a Marcelo Ebrard", comentó Gutiérrez Falcón.

Sobre este punto, el comunicólogo de la UNAM indicó que contradecir a su Gabinete, al IMSS, a gobernadores (como fue con la gravedad del sargazo en Quintana Roo), o también a las calificadores sobre la situación de Pemex, tiene un motivo.

"La clave de todo es que la oposición quiere tratarlo como a un político tradicional, pero no entienden que no lo es. Su otra zona de confort es la polarización", dijo Gerson Hernández, quien subrayó que "corrupción" es la palabra que más usa en sus conferencias diarias, mientras que "pueblo" fue la que repitió con mayor frecuencia cuando fue Jefe de Gobierno. 

Cuartoscuro

Hay un tema que flota en el aire, aun cuando Obrador parece tener a su gobierno bajo control. Las renuncias de personajes de primera línea como Germán Martínez al IMSS o Tonatiuh Guillén al Instituto Nacional de Migración, lo cual a más de uno ha dejado con la imagen de un descontrol en Palacio. Lo anterior junto a la supuesta inminencia de una renuncia de Olga Sánchez Cordero a la Segob, dependencia a la que por lo demás adelgazó hasta convertir a Relaciones Exteriores en "supersecretaría".

"Si cada mañana el presidente viene a enmendar la plana es porque debe desmarcarse de posibles catástrofes. Es el caso del super-secretario en que convirtió a Ebrard, pues si todo sale mal no será AMLO quien pague los platos rotos", añadió Gerson Hernández. Compartiendo esta visión, el licenciado en derecho por la Universidad Autónoma de Coahuila completó que el presidente espera con ansias el segundo año de su gobierno.

"Verás que el 1 de julio, en el evento en el Zócalo, dará a conocer las cifras de los ahorros por la austeridad y el combate a la corrupción. Tuvo que garantizar la protección y el cumplimiento del 'primero los pobres', para a continuación, en su siguiente año, comenzar a derramar los recursos al sector privado. Mayor gasto público, mayor inversión, capital semilla, eso viene luego de un año difícil de transición del neoliberalismo a la 4T".