Para el grupo que encabeza Agustín Carstens, las amenazas por las medidas económicas y comerciales que tomaría Donald Trump ya no son parte focal de sus preocupaciones, sin embargo, sí alertan sobre situaciones internas ante la pérdida de confianza empresarial y del consumidor como factores de riesgo para el crecimiento económico. 

El pasado 30 de marzo los integrantes de la Junta de Gobierno del Banxico se reunieron para decidir un nuevo incremento en la tasa de interés, una decisión unánime ante las condiciones de mercado.

En dicha reunión destacó la convergencia de opiniones respecto a lo que está ocurriendo en Estados Unidos, un tema que era primordial preocupación apenas unos meses atrás. Sin embargo, ahora ponen en duda la capacidad de implementar los cambios esperados de política económica, dada la dificultad que ha tenido la nueva administración de este país en avanzar su agenda.

Por ejemplo, uno de los integrantes detalló que el desacuerdo en el Congreso en relación con las reformas en materia de salud "podría estar anticipando la dificultad de alcanzar acuerdos legislativos en materia fiscal, comercial y de regulación". Otro agregó dudas sobre la viabilidad de estas propuestas una vez que se vean sujetas a un análisis más riguroso.

A pesar de ello, los especialistas no entregan un escenario fuera de riesgos, pues alertan sobre otros temas en la economía mundial y que acaso también se desliza para la vida política del país: la implementación de políticas proteccionistas a nivel global, pues consideran que "tendría un efecto sobre los flujos comerciales y de inversión entre países".

También se habló de una política monetaria menos acomodaticia por parte de las principales economías avanzadas ante el avance de la inflación y una reversión abrupta del sentimiento de los inversionistas.

Pero las mayores preocupaciones giran en torno a una desaceleración gradual económica en el país para los próximos meses. Sobre todo, apuntaron a la confianza empresarial, que se mantiene en niveles bajos.

"Junto con los esfuerzos de fortalecimiento de las finanzas públicas, hace anticipar una inversión débil a lo largo del año", consideraron los integrantes de la junta del Banxico.

En cuanto al reciente incremento en tasas, no desmienten al mercado que está en espera de otro movimiento, aunque lanzaron señales de que serán más moderados. Y es que consideraron que conviene seguir reforzando la postura de política monetaria para lograr la convergencia de la inflación a su meta, del 3 por ciento +/- un punto porcentual -la cual apuntan será hacia 2018-.

En ese sentido, todos los miembros de la Junta destacaron que "es conveniente seguir reforzando la postura de política monetaria para estar en posibilidades de lograr la convergencia de la inflación a su meta".