Cuando Wilbur Ross dijo días atrás que las negociaciones comenzarían hasta finales de año se prendió la alerta en el gabinete de Peña Nieto: el acuerdo podría escapar de sus manos y ser el sucesor en Los Pinos quien cierre un nuevo Tratado de Libre Comercio. No sólo eso: Videgaray no podría mostrar la última carta de preparaba para meterse otra vez en la pelea.

Como adelantó La Política Online, López Obrador le pidió a sus equipos, encabezados por Alfonso Romo, que empiecen a estudiar este tema a fondo, porque podrían heredarlo. Pero también le pidió intervención a Fernando Turner, el actual secretario de Economía de Nuevo León, con gran cercanía a Ildefonso Guajardo. 

Esta información fue confirmada por el propio líder de Morena desde Washington. En su nueva gira por los Estados Unidos, AMLO no dejó posibilidad a dudas y en su discurso ya se apropió del tema. Criticó la amenaza arancelaria y dijo que acudiría a organismos internacionales en materia de comercio para imponer una denuncia.

"Respecto al TLC espero que no se vaya a cometer el error de hacer una revisión apresurada. Pienso que no va a alcanzar el tiempo, que no se va a llevar a cabo ninguna revisión comercial antes de las elecciones en México. Tanto en Washington como Distrito Federal, en Palacio las cosas caminan despacio", dijo el líder de Morena en conferencia de prensa.  

Asumiendo que podría ser su eventual Gabinete el que negocie el Tratado, AMLO habló de su visión sobre el tema: "No es así de simple de que por una orden ejecutiva se cancele la relación comercial. Está bastante interrelacionado el comercio entre ambos países". 

Además, criticó la celeridad que se le está dando a temas migratorios a diferencia de los comerciales. "Nos molesta que sí haya una orden de persecución al migrante y en el caso del TLCAN lo van a revisar con cuidado porque están de por medio sus intereses". 

El aspirante presidencial también habló sobre la reforma energética. Insistió en que se van a revisar todas las reformas estructurales "porque están manchadas de corrupción y el 95% de mexicanos no saben en qué consistió la llamada reforma energética por lo que vamos a utilizar un método democrático".

Le envió un mensaje también a los petroleros, que como adelantó LPO no creen que López Obrador pueda revertir la reforme energética: "Se preguntará al pueblo si quieren que sigan. Y si hay negativa, iniciaremos procesos legales para revertirlas. No habrá un proceso expropiatorio. No vamos a contestar una imposición con otra imposición. Pero sí vamos a revisar todo lo que se ha hecho".

La conferencia fue ofrecida luego de que el político tabasqueño acudiera a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para solicitar medidas cautelares contra las políticas migratorias del presidente Donald Trump.