Antes del 9 de septiembre deberán estar listas las disposiciones secundarias de la Ley para Regular las Instituciones de Tecnología Financiera (Ley Fintech), las cuales fueron realizadas por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y ahora están en manos de la Cofemer, que ya se leen como un paso importante, pero aún no suficiente para el sector.

En el mercado, las peticiones para estas leyes secundarias son bastas, pero las autoridades han ido avanzando poco a poco en un campo novedoso para México y cuya ley apenas entró en vigor en marzo.

Se trata de una ley que busca regular un sector que ha tenido mucho auge en México y en Latinoamérica y que tiene que ver con el desarrollo de las plataformas tecnológicas, aplicaciones, página web y sistemas que permiten el uso de la tecnología en todo tipo de transacciones.

Son cuatro los aspectos que regula: el financiamiento colectivo o crowdfunding, los activos virtuales, las API o intercambio de información entre instituciones y la regulación sandbox o de prueba.

También estipula un marco legislativo para regular las plataformas denominadas Instituciones de Tecnología Financiera (ITF), mediante las que se celebran operaciones y servicios financieros relacionados con el acceso al financiamiento e inversión, servicios de emisión, administración, redención y transmisión de fondos de pago electrónico.

Todo ello, tomando en cuenta que la tecnología está avanzando más rápido que las leyes, por lo que ya se permite un esquema en el que cabe todo aquello que no sea comprendido en otras instituciones, además de que le permite a la autoridad conocer eñ desarrollo de las plataformas y de la misma manera, irlas regulando". 

¿Pero es suficiente? En diálogo con La Política Online, el abogado corporativo de Jones Day, Guillermo Larrea, explicó que estas disposiciones representarán un gran avance para el sector, pero "aún queda muchos pendientes".

José Antonio González Anaya, secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP)

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La comisión que encabeza Mario Emilio Gutiérrez, por lo pronto revisa 4 disposiciones operativas que tienen que ver con el capital mínimo de la Fintech, los límites operativos para el crowdfunding o financiamiento colectivo y los topes de efectivo para usuarios.

Para el experto, con estas reglas se da un avance importante en el sector, pues se trata de conceptos que ya reconocen el uso de innovaciones tecnologías financieras e implicaciones de lavado de dinero y terrorismo.

"Permite así tener un marco genérico para salvaguardar intereses del sector financiero, documentaciones, capital mínimo, constancia electrónica, metodología de evaluación, entre otros procedimientos".

Sin embargo, reconoce que aún hay pendientes. "Faltan un montón de cosas más. Esta es una primera entrega y le da forma a todo el procedimiento de ley Fintech, por que faltaba información al respecto".

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Y es que resaltó que existe un apetito importante en la región. "Con estos pasos México se ha puesto a la vanguardia en Latinoamérica con una regulación especifica para la ciber seguridad para Fintech, lo cual, por ejemplo, Brasil aún no desarrolla y ahora México se contempla como un 'hub' o centro de atracción de instituciones británicas y otras regiones".

No obstante, en su opinión, los pasos siguientes tendrían que ir por la ruta del entendimiento de los activos virtuales -como las criptomonedas-, cómo se regularan, así como en el tema de disposiciones específicas en materia de seguridad, cómo se van a correlacionar ante el uso de datos con la ley de protección de datos a particulares, entre otros.

"Si existen esos pendientes tampoco es una falta de la autoridad, sino que hasta ahora eran imposibles trabajarlos por lo general que era la propia ley", explicó Larrea.