Robert Lighthizer, representante comercial de EU, no vendrá a CDMX para la quinta ronda de la renegociación del TLCAN. El dato se conoció ayer por la noche en la Secretaría de Economía. Tampoco habrá reunión entre los funcionarios de los tres países ni conferencia de prensa como ha ocurrido hasta ahora en todas las rondas previas. La misma lógica se aplicaría a la ronda sexta pautada para mediados de diciembre.

La ausencia de Lighthizer es vista como un factor positivo por el equipo negociador mexicano. Bajará la densidad política en la negociación y se podrá avanzar en temas técnicos del acuerdo. Y tal vez lo más importante: sin Lighthizer EU no abandonará la mesa de negociación.

Sin la llegada del funcionario además ya no es obligatoria una declaración final conjunta lo cual evita que los países deban hacer posicionamientos o mostrar fisuras en público.

Esta semana Wilbur Ross, secretario de Comercio, tuvo durísimas declaraciones para con el tratado y en cierta medida le ganó de mano esta vez a Lighthizer que era el que venía haciendo las declaraciones de corte político.

Cerca de Ildefonso Guajardo observan que pareciera existir una competencia entre Ross y Lighthizer por ver quien está más alineado con el discurso de la Casa Blanca. Como ya lo ha revelado LPO, Guajardo cree que el plan de Lighthizer es reemplazar a Ross y ser el próximo secretario de Comercio.

Ross expuso que cree que las negociaciones del TLCAN llegarán a algún tipo de acuerdo para la evaluación del presidente Donald Trump; pero expresó que México y Canadá sufrirían mucho más que Estados Unidos si el pacto se acaba.

"Ciertamente preferiría que recuperaran el sentido e hicieran un trato sensato", dijo Ross en un foro patrocinado por el diario Wall Street Journal. "En cualquier negociación, si tienes una parte que de hecho no está preparada para retirarse cualquiera que sea la situación, esa parte va a perder".