Marcos se cobró viejas facturas con Prat Gay: "Hay que garantizar una coherencia en el equipo"
Marcos Peña se cobró viejas facturas con Alfonso Prat Gay al anunciar su salida del Gobierno por decisión de Mauricio Macri, en una conferencia donde remarcó que había que “garantizar” la “coherencia” del gabinete y celebró que "siempre prima la visión del Presidente".
El jefe de Gabinete nunca toleró al ahora ex ministro y si hasta hoy no cumplió su objetivo de eyectarlo del Gobierno fue por decisión de Macri, el único dentro de la Casa Rosada que respaldaba a Prat Gay, lo que se interrumpió en la disputa por Ganancias cuando el presidente lo corrió totalmente.
Por eso Peña dejó de lado los típicos formalismos de “motivos personales” -que acaso hubieran caído mejor en los mercados- y reiteró que "efectivamente el presidente le pidió la renuncia". Para emprolijar la situación, el ex funcionario fue subido a un avión para que almuerce en Villa La Angostura con Macri, que no interrumpirá sus vacaciones.
Peña dejó claro que el despido fue por los cuestionamientos de Prat Gay al funcionamiento económico del Gobierno y el pedido para concentrar las decisiones, que por el contrario la Rosada decidió profundizar con la división del Ministerio de Hacienda y Finanzas.
"Se trató de una discusión que ha estado abierta todo el año respecto al diseño organizacional del gobierno y respecto al proceso de toma de decisiones. Pero no son discusiones de fondo ni de política económica, sino sobre cómo era la mejor forma de garantizar una coherencia y una consistencia de un equipo”, recalcó Peña.
“Siempre dijimos que creíamos en el trabajo en equipo, donde el que está a cargo de la política económica es el Presidente”, celebró el jefe de Gabinete. "No se trata de internas, sino de visiones de funcionamiento y donde claramente prima siempre la visión del presidente, que es el que esta elegido para poder definir el equipo", insistió.
La tensión entre Prat Gay y Peña data desde el inicio de la gestión de Macri. De hecho, en enero el jefe de Gabinete borró al ministro de la cobertura que hizo el Gobierno de la gira presidencial por el foro de Davos, donde no hubo información oficial sobre las actividades del funcionario. Prat Gay nunca aceptó someterse a los lineamientos comunicacionales de Marcos.
El renunciado Prat Gay también tuvo que lidiar con los vicejefes de Gabinete, Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, a quienes nunca consideró interlocutores válidos ni aceptó que lo supervisen. La evidente muestra de esto fue que los dos funcionarios lo mantuvieron a raya con el manejo del presupuesto, como explicó LPO. Semanas atrás, Lopetegui le recriminó públicamente el nivel "insostenible" de déficit.
Este mediodía en el entorno de Prat Gay estaban sorprendidos por el despido y apuntaban a una jugada de Peña y Quintana en su contra. En la conferencia de prensa del jefe de Gabinete, llamó la atención lo relajados -y por momentos sonrientes- que estaban sus funcionarios más cercanos.