Las elecciones para la presidencia del Comité Nacional Republicano (RNC) muestran un panorama insospechado. Después de alimentar durante años las fuerzas extremas que se identifican con las consignas de MAGA, Donald Trump empieza a ver como su creación se le va de las manos.

De buena relación con Trump, la actual presidenta del RNC, Ronna McDaniel, enfrenta desde hace tiempo una furiosa campaña de los sectores de ultraderecha de cara a la elección del próximo viernes, 27 de enero, en la cual espera acceder a su cuarto mandato consecutivo.

La contienda por la presidencia del RNC se decidirá el viernes mediante votación secreta cuando los funcionarios republicanos de los 50 estados se reúnan en el sur de California. Aunque la disputa principal por el liderazgo formal del Comité Republicano se da entre candidatas que coinciden en respaldar a Trump, la derrota del trumpismo en las elecciones más importantes de noviembre pasado desató una crisis interna y un pase de facturas que no ha hecho más que profundizarse en los últimos tiempos.

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Si al californiano Kevin McCarthy le costó nada menos que 15 votaciones conseguir el apoyo de los republicanos rebeldes y convertirse en el orador de la Cámara de Representantes, nada hace presagiar que a la texana McDaniel las cosas vayan a resultarle fáciles.

Los dos episodios exhiben las peligrosas divisiones que se profundizaron tras las elecciones de noviembre. Según publicó AP, los que están dentro de la lucha creen que los días que restan hasta que el viernes se elija al nuevo presidente en un lujoso balneario de California pueden ser tensos porque los grupos MAGA amenazan con anular la reelección de McDaniel.

En su batalla por llegar a lo más alto, la abogada Harmeet Dhillon ha acusado a McDaniel por practicar la intolerancia religiosa, realizar gastos crónicos indebidos y ejercer una influencia negativa sobre Trump. También en la carrera está el CEO de My Pillow, Mike Lindell, un teórico de la conspiración pro-Trump que obtuvo suficiente apoyo para calificar para la boleta electoral.

Ronna McDaniel, la presidente del Comite Nacional Republicano que va en busca de su cuarto mandato.

AP

Trump se mueve en el terreno de la ambigüedad y no se ha pronunciado de manera explícita, pero McDaniel, -la sobrina del senador de Utah Mitt Romney- recibe cuestionamientos de los mismos sectores de ultraderecha que le hicieron la vida imposible a McCarthy en el Congreso. En los dos casos, Trump ha tenido problemas para controlar a sus propios leales, que están enfurecidos por los malos resultados de noviembre y parecen decididos a luchar contra el statu quo, ya sea McCarthy o McDaniel, sin importar el costo.

Mientras tanto, la dirigente nacida en Austin que Trump entronizó en 2016 asegura que cuenta con más de 100 de los 168 miembros del RNC que deben definir la elección. Según sus estatutos, el Comité debe permanecer neutral en las primarias presidenciales de 204 en las que Trump es el primer y único anotado hasta el momento. 

Trump se mueve en el terreno de la ambigüedad y no se ha pronunciado. La sobrina de Mitt Romney recibe cuestionamientos de los mismos sectores de ultraderecha que le hicieron la vida imposible a McCarthy en el Congreso.

Aún así, Trump podría finalmente respaldar a McDaniel antes de la votación del viernes si se considera necesario su apoyo público, según personas familiarizadas con su pensamiento que, al igual que otros entrevistados, hablaron bajo condición de anonimato para compartir discusiones internas.

Al menos tres importantes lugartenientes de Trump, los asesores principales Susie Wiles, Chris LaCivita y Clayton Henson, planean asistir a la reunión de invierno de tres días de la RNC de esta semana en el sur de California, donde se llevará a cabo la votación.

La abogada Dhillon es una fervorosa creyente de ascendencia india, vicepresidenta del Partido Republicano de California y miembro del RNC. En su lista de invitados, podría incluir a grupos de fuerte militancia negacionista entre los que se destaca la ex candidata a gobernador de Arizona Kari Lake. También al influyente de MAGA Charlie Kirk y al cantante de country John Rich.

Harmeet Dhillon, la abogada de California que tiene el apoyo de la ultraderecha. 

AP

Entre las voces más fuertes del movimiento conservador exigen la salida de McDaniel, se destacan algunas voces de gran predicamento en los medios de comunicación de derecha que llegan a millones de fieles republicanos. Entre ellas, el popular animador supremacista de Fox News, Tucker Carlson, que reclama desde hace tiempo un cambio en el RNC.

Entre los instigadores más prominentes de la ola de sentimiento anti-McDaniel sobresale Carlson, a quien Dhillon conoce desde principios de la década de 1990, cuando ambos trabajaban como editores asistentes en la revista "Policy Review" de Heritage Foundation.

 La abogada Dhillon es una fervorosa creyente de ascendencia india que es vicepresidenta del Partido Republicano de California. Entre sus aliados, hay dos que se destacan por su militancia negacionista: la ex candidata en Arizona Kari Lake y el supremacista de Fox News Tucker Carlson.  

En diciembre pasado, desde el escenario en la conferencia de Turning Point USA, en Phoenix, Carlson le dio un saludo a Dhillon antes de criticar al RNC bajo McDaniel. "Estás volando en aviones privados con el dinero que, como dulces y aterrorizados votantes republicanos, te han enviado desde el centro del país. Y estás perdiendo elecciones. Si ganas las elecciones, bueno, podemos hablar de eso. Si estás perdiendo, sal. No podemos recompensar la incompetencia". Además, Carlson entrevistó al artista de música country y donante de la RNC John Rich en su programa en horario estelar. Allí, Rich condenó a los funcionarios de la RNC como "sinvergüenzas" que estaban "abusando de su posición con los conservadores de todo el país" y aseguró que iba a entregarle al comité ni un centavo más.

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También la animadora Laura Ingraham, quien asistió a las mismas facultades de pregrado y derecho que Dhillon, la llevó a su programa de Fox News y pidió un "cambio de guardia" en la RNC. 

Como respuesta, la candidatura de la californiana ha suscitado objeciones de algunos miembros del RNC que dicen que Dhillon está generando controversia innecesariamente y cuestionan su rol en el Comité: como abogada con sede en San Francisco, la firma de Dhillon ha recibido aproximadamente $1 millón por brindar servicios legales al comité. Dhillon dijo que si fuera elegida presidenta, se retiraría de cualquier decisión sobre qué firmas de abogados contrata el RNC..

Entre la gran cantidad de otras figuras conservadoras de los medios que militan en la línea MAGA y piden un recambio también están Charlie Kirk, Mark Levin, Ben Shapiro, Megyn Kelly, Dan Bongino, Lou Dobbs, Kurt Schlichter y Erick Erickson

Sin embargo, los alineamientos pueden llevar a confusión. Entre los avales con los que cuenta McDaniel está el estratega de campaña y publicista de extrema derecha Steve Bannon, que invitó a McDaniel a su programa y dijo que su manejo de las finanzas de RNC era una "pieza de éxito".